Ser gay o no ser gay, todo sea por el poder

Faltan menos de 50 días para que ocurra el “milagro mexicano”, y no me refiero a que los dioses del Olimpo o los diferentes santos católicos intervengan en el día de la elección.
Este proceso ha estado empantanado por la corrupción, el mesianismo, el capricho y la insipidez, y lo sostendré hasta que se demuestre la transparencia y dejen los candidatos de hacer comparaciones con las economías de otros países, en lugar de estar como pericos repitiendo un discurso agresivo el uno contra el otro y todos contra todos, deberían trabajar en estos días en dar una imagen fuerte y sólida como aspirantes al máximo cargo político en México.
A veces siento que los representantes de los partidos políticos y muchos servidores públicos creen que todos somos ignorantes y que no tenemos memoria, pero se les olvida que, afortunadamente, llevamos la materia de historia desde la primaria y que hay libros físicos y digitales que sirven para consultar las fechas exactas y ver qué ha pasado en nuestro país en los últimos sexenios.
En donde el modelo neoliberal de los itamitas ha generado pobreza en la mayoría de los mexicanos y, obviamente, ha hecho nuevos millonarios en el país, que no venían de familia pudiente y con historia de negocios, y que mediante la ocupación de cargos públicos y el desmantelamiento del Estado, han creado fortunas de dudosa procedencia.
El sarcasmo mexicano es excelente y muy creativo, pero, a veces es demasiado ofensivo e hiriente, la verdad no sé cómo llamar a la farsa que pretenden hacer en Oaxaca en estas elecciones, en donde tomaron la bandera LGBTI para llenar espacios como candidatos y cubrir cuota de género.
Suena inverosímil, pero es cierto, un manada de brillantes asesores y políticos tomaron la decisión de postular a un grupo de “hombres” para las alcandías como si fueran personas transgénero, con anterioridad no lo intentó el PVEM, y ahora son los partidos PRI, PAN, PRD, Movimiento Ciudadano y Nueva Alianza los que postularon a presuntos integrantes de la minoría LGBTI para intentar cumplir con la paridad de género obligatoria.
A mí en lo personal se me hace una falta de respeto para todos los ciudadanos y principalmente para esta comunidad que ha peleado para ser reconocida y respetada, en una sociedad machista, homofóbica y misógina.
Y es terrible que los políticos con el único objetivo de ocupar un cargo público, se burlen de las propias autoridades y de las leyes, no me queda claro, ¿quieren ser alcaldes a como dé lugar, para representar al pueblo y trabajar por él?, o ¿quieren ser alcaldes que desde el inicio se burlan de todos nosotros, fingiendo ser homosexuales con tal de vivir del erario?
Es una burla de verdad lo que hicieron al postularse como minoría, para cubrir cuota, qué les pasa a los líderes de los partidos políticos, están enfermos de poder o simplemente han perdido la cabeza con estas elecciones y la burla o el cinismo es mejor que la razón.
Actualmente, existe sólo una gobernadora y es Claudia Pavlovich de Sonora, el gobierno de Enrique Peña Nieto se ha caracterizado por los feminicidios y la violencia en general, las leyes electorales mexicanas exigen paridad de género en estas elecciones, pero dónde quedó, sólo en papel.
A la presidencia sólo hay una mujer, que ocupa el 20% del universo de candidatos; son 4 hombres y una fémina los que contienden por la silla presidencial, entonces no hay paridad, es una fantasía. Siempre se ha dicho que muchos gobernadores han sido homosexuales, pero que han tenido que fingir relaciones matrimoniales y reproducirse con tal de tener poder, hoy debería de ser diferente, mas no lo es.
Las preferencias sexuales no deberían influir en una elección, pero si las personas como los gobernadores tienen que ocultar su homosexualidad, qué se puede esperar de alguien que miente con una situación que debería ser vista con normalidad, pero prefieren seguir la telenovela para el pueblo y fingir matrimonios “perfectos”.
Mentir para obtener poder es malo, omitir para permanecer en el poder también es incorrecto, el México incluyente que se necesita, está muy lejos de nuestra realidad, el México seguro que pedimos está aún más lejos, qué pasa en un país en donde casi cada 3 horas se comete un feminicidio, 7 mujeres son asesinadas diariamente y más del 50% de mexicanos viven en la pobreza. Estos datos son preocupantes y obvios. ¿Los candidatos toman en cuenta estos problemas? Ahí está la tarea para ellos.
@fuaper