Desde el gobierno de Ulises Ruiz se puso en marcha el programa de simplificación en el Registro Civil, que tenía como propósito ahorrar tiempo, dinero y esfuerzo a los usuarios, para el trámite de actas de nacimiento, matrimonio o determinado documento de identidad. Se montaron los famosos quioscos, los cuales, a través de la aplicación de ciertos comandos y el depósito de la cantidad requerida, otorgaban sin más los citados documentos. Dichos instrumentos evitaban que el ciudadano acudiera a las oficinas centrales, el Archivo General o las oficinas regionales, con lo que implicaba de pérdida de tiempo y a veces, desplazarse hasta el capital del estado. El programa funcionó sólo un tiempo. A poco fracasó y nadie supo del destino de los famosos quioscos.
Durante el gobierno de Gabino Cué no hubo mayores intentos de reactivar los referidos instrumentos. Simplemente habían pasado a la historia, sino hasta recientemente cuando en el Registro Civil se empezó a publicitar su existencia. Los famosos módulos digitales se pusieron en marcha, según el titular de dicha área del ejecutivo, en la región del Istmo de Tehuantepec”, en algunos municipios como Juchitán de Zaragoza, Santo Domingo Tehuantepec, San Juan Guichicovi, Matías Romero, el Barrio de la Soledad y El Espinal. A decir del funcionario, con la nueva tecnología los ciudadanos podrán acercarse a los módulos y obtener de manera rápida y sencilla su acta de nacimiento evitando trámites engorrosos y accediendo así a la certeza jurídica de forma segura y expedita.
Es más, se capacitó al personal para auxiliar a los ciudadanos en los sencillos pasos para la emisión del acta, ya que mediante instrucciones que el usuario puede ir siguiendo en la pantalla, el trámite se realiza en menos de 10 minutos para la obtención del acta de nacimiento con un costo de 97 pesos y de 139 pesos de otro estado de la República Mexicana. Sin embargo, como trascendió la semana anterior, todo el buen propósito de agilizar y simplificar dicho trámite se vino abajo, debido a la falta de atención en el suministro de insumos para la buena operación de los referidos módulos digitales, por falta de papel. En redes sociales circuló una foto en donde se observa uno de los módulos con un letrero que dice: “no funciona por falta de papel”. Ello implica que, de nada sirve poner en marcha un programa que ha implicado cierto costo, sin atender las necesidades del mismo. El propósito de simplificar un trámite administrativo se va a la basura.
Seguridad: Más recursos
El tema de la seguridad en Oaxaca ha generado grandes controversias. En principio, porque la ola criminal que se ha desatado en la entidad, con decenas de ejecuciones cada semana y un número creciente de las mismas, obligan a replantear el sobado eslogan oficial de que somos uno de los diez estados más seguros del país, además, porque a la fecha no se ha visto una estrategia bien integrada para combatir el crimen, asumiendo las dependencias estatales responsables, un papel pasivo. Hay que recordar que, en una de sus entrevistas mañaneras, el mismo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, calificó a Tuxtepec, como una de las ciudades más violentas del país. Y en efecto, así es. En lo que va del año, menos de un mes, van alrededor de trece ejecuciones. Lo paradójico es que hay recursos para fortalecer la seguridad, pero los mismos son sub-ejercidos, como trascendió el 2019.
Para el 2020, el estado recibirá 256 millones 278 mil 696 pesos en financiamiento conjunto. Los siete municipios beneficiados con el recurso Fortaseg 2020 son Huajuapan de León con seis millones y Juchitán de Zaragoza con 15 millones 426 mil 438 pesos. Adicionalmente, Oaxaca de Juárez será apoyado con 23 millones 134 mil 6 pesos; Salina Cruz con 14 millones 94 mil 217 pesos; San Juan Bautista Tuxtepec con 16 millones 10 mil 706 pesos; Santa Cruz Xoxocotlán con 13 millones 92 mil 238 pesos; y Santo Domingo Tehuantepec con cuatro millones 456 mil 349 pesos. Dichos recursos provienen tanto del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP) y el programa de Fortalecimiento para la Seguridad (Fortaseg).
Es decir, este año, siete municipios oaxaqueños contarán con recursos adicionales para fomentar los mecanismos de seguridad en sus jurisdicciones. No habrá pues pretexto para justificar el crecimiento de los índices delictivos, sino de dar cumplimiento a las estrategias nacionales en materia de seguridad pública, así como de fortalecer las acciones que realiza el gobierno estatal. La ciudadanía espera que los recursos adicionales otorgados tanto al gobierno estatal como a los siete municipios, no se desvíen hacia otros propósitos, sino que efectivamente cumplan con su cometido de robustecer la seguridad, en bien de las familias oaxaqueñas. Los organismos encargados de vigilar y supervisar el uso correcto de los mismos, deben partir de la premisa de que más allá de discursos triunfalistas, Oaxaca requiere de mecanismos más eficaces para este cuestionado rubro.