Salina Cruz ya se integró a las ZEE
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Opinión

Crónicas Oaxaqueñas

Salina Cruz ya se integró a las ZEE

 


Columna 64. Salina Cruz ya se integró a las ZEE. El lunes 18 de diciembre del recién terminado año 2017, la clase política y empresarial del más alto nivel de México llegaron de visita al Istmo de Tehuantepec, encabezados por el Presidente Enrique Peña Nieto y por Gerardo Gutiérrez Candiani, Presidente de las Zonas Económicas Especiales de México, el motivo fue formalizar la integración de Salina Cruz a las ZEE, algo que se esperaba desde que se anunció en el 2016 el proyecto de impulsar cuatro zonas geográficas en nuestro país, a. Puerto Lázaro Cárdenas, que tiene influencia en los estados de Guerrero y Michoacán, b. el Istmo de Tehuantepec, un corredor que va desde Coatzacoalcos, Veracruz hasta Salina Cruz, Oaxaca, c. Puerto Chiapas en el estado del mismo nombre y finalmente d. toda la región que comprende los estados de Tabasco y Campeche.

El tema de las Zonas Económicas Especiales no es precisamente nuevo a nivel mundial, de hecho la primera en el planeta se instaló en 1959 en el aeropuerto de Dublín, Irlanda, a mediados de los ochentas vino el gran auge aumentando fuertemente la cantidad de países que declaraban zonas de comercio internacional, llegando a 47 con 176 ZEE, actualmente ya es increíble este movimiento comercial, según la Organización Internacional del Trabajo, (OIT), existen más de tres mil quinientas Zonas Económicas Especiales en ciento treinta países del mundo, eso es verdaderamente un mundo globalizado.

La intención de crear ZEE en México, es detonar el desarrollo en estados donde existen mayores rezagos económicos y por supuesto también sociales, es decir, donde se concentra la pobreza y la menor productividad, son comunidades donde se requiere impulsar la construcción de una infraestructura económica, donde se otorguen condiciones especiales para las empresas que se instalen en esas regiones, tales como incentivos fiscales y finalmente, que sean puertos de salida de mercancías a mercados internacionales.

La Comisión de las Zonas Económicas Especiales, escogió a las comunidades del sur mexicano por las siguientes razones que copio textualmente: “Este rezago en la Zona Sur de México, obedece a una serie de deficiencias estructurales, entre ellas bajos niveles de capital humano, carencias de infraestructura, baja integración a la economía global, ausencia de una masa crítica de empresas en sectores altamente productivos, insuficiencia de servicios de soporte, elevados niveles de informalidad, escasa innovación, acceso limitado al crédito, ambiente de negocios poco atractivo y Estado de Derecho débil”, así o más dramático, claro y totalmente realista el análisis.

Según esa misma Comisión de las ZEE, cada estado tiene una vocación que hay que explotar como ventaja competitiva, en Coatzacoalcos se desarrolla la industria del plástico, la petroquímica, la química y la del agro, en Salina Cruz, la industria textil y del vestido, maquinaria y equipo y todo lo relacionado con energías renovables, el resto del Istmo de Tehuantepec se supone que despega en la industria automotriz, siderúrgica, forestal y minera, en Puerto Chiapas se encuentra industria del papel y su pulpa, eléctrica, electrónica, agroindustria y la textil y del vestido, el Puerto de Lázaro Cárdenas se debe especializar en industria automotriz, metalmecánica, minera, siderúrgico, químico, eléctrico y de la construcción, finalmente en Tabasco y Campeche, industria química y del plástico, metales, maquinaria y equipo.

El banderazo de salida se dio a mediados del año pasado, en esa primera etapa no se integró Salina Cruz a las ZEE, sin duda eso prendió las alarmas en el gobierno del estado de Oaxaca, para nadie es un secreto que alrededor del 90% del territorio Oaxaqueño tiene carácter de agrario, es decir, comunal o ejidal, por lo tanto, no hay certeza para las empresas interesadas en invertir en territorio oaxaqueño de que su dinero será empleado en tierra firme de su propiedad, afortunadamente ya en diciembre fue integrado Salina Cruz oficialmente.

Cumplir con las metas trazadas por el gobierno mexicano será muy difícil, se supone que durante este 2018, en cada ubicación propuesta para integrarse a las ZEE, deberá estar funcionando una industria ancla que detone el resto del desarrollo, el problema es que son mínimos los presupuestos asignados para este arranque, según la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la inversión total del proyecto es de 127,000 millones de pesos y durante el 2017 solo se asignaron dos mil.

Se espera que la industria privada con capacidad exportadora, aporte el 70% de ese dinero total requerido, el conflicto es que sin seguridad y sin incentivos fiscales importantes, no van a llegar las empresas a esas zonas a la velocidad esperada, se dijo que el impuesto sobre la renta bajaría a cero siempre y cuando se aprueben y apliquen las reformas fiscales en los Estados Unidos, donde se propone una reducción de impuesto corporativo del 35 al 21%, veremos en los próximos días, cómo quedan finalmente los apoyos en materia fiscal en México para los estados involucrados en esas Zonas.

Aparte de los beneficios fiscales, se ofrece un marco regulatorio ágil, un régimen aduanero especial, infraestructura adecuada de puertos, carreteras y servicios, programas de apoyo, etc. vamos Oaxaca, despierta, deja ya los conflictos sin sentido y vamos a remar todos juntos, tenemos una oportunidad histórica una vez más, cuantas vamos a dejar ir, no terminamos de entender que cada quien tiene lo que se merece.

Seguiré comentando la próxima semana.

Si desea contactarme favor escribir a [email protected]

Facebook: Jaime Palau Ranz
Twitter: @jpranz