Deserción, migración y gobierno impávido
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BARATARIA

Deserción, migración y gobierno impávido

 


 

El miércoles pasado las instalaciones de EL IMPARCIAL se vieron engalanadas con la visita de un grupo de estudiantes de educación media superior provenientes del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Oaxaca (Cecyteo) de Educación Media Superior a Distancia (Emsad) de San José Monteverde, en la Mixteca alta oaxaqueña, a poco más de 5 horas de la capital.

El grupo mostraba una particularidad: 5 estudiantes, todas mujeres. Luego del recorrido por esta casa editorial, el poco disimulado reportero preguntó en torno a esta singularidad. La respuesta fue amplia y una fotografía de lo que está sucediendo en la educación en Oaxaca, en el interior del estado y la inacción de las autoridades, que ni por enteradas se dan. 

El grupo, nos relatan, inició con poco más de 35 estudiantes, uno a uno han ido desertando ante la pasividad de los que cobran como directores hasta quedar sólo 5 hermosas adolescentes empecinadas en concluir su bachillerato.

Parte del fenómeno, explican los profesores es que, con el advenimiento de nueva cuenta de las clases presenciales, los alumnos matriculados han dejado de asistir, saldo de la pandemia. Prefieren las clases virtuales, “que les dejemos trabajos y ellos lo entreguen, ya no les está ‘acomodando’ el tener que asistir a la escuela”. 

La deserción es muy alta y, por lo explicitado, esto no es exclusivo del grupo, ni solo del Emsad 78 de San José Monteverde, del municipio de San Antonino Monteverde, se extiende a buena parte del sistema educativo de educación media y media superior de Oaxaca, no sabemos si del país, habrá que checar las estadísticas.

Las alumnas, además, han tomado el pulso de sus condiscípulos, “se quieren ir al otro lado, dicen que terminando la escuela se van a Estados Unidos, allá tienen familiares”. O sea, el proyecto a futuro de la juventud no está en la Mixteca, ni siquiera en Oaxaca, está allá, en otro país.

Para llegar a las instalaciones de El Mejor Diario de Oaxaca, las 5 alumnas y dos profesores debieron cubrir un recorrido de alrededor de 160 kilómetros iniciado a las 4 de la mañana desde su comunidad, transbordar en Teposcolula, pasar por Asunción Nochixtlán para llegar al iniciar la tarde.

Todo el traslado lo hicieron en transporte público, autobuses y, en la ciudad, en suburbanos dado que visitaron varios puntos de interés académico.

 ¿Traen vehículo? Se atrevió el inocente reportero. No, fue la respuesta al unísono.

¿Cuentan con viáticos?. No.

¿Se van hoy? No, la visita es de tres días, programamos recorridos por varios lugares.

¿Los apoyaron con hospedaje? No. Las cuentas corren a cargo de los padres de familia de cada una de las alumnas, el Cecyteo solo dio autorización. Nada más. 

O sea, que nuestras emblemáticas autoridades educativas ni siquiera la bendición les otorgaron.

La ilustre directora del Cecyteo, Blanca Luz Martínez ¿se habrá enterado de esta visita? Acaso ya visitó o recorrió el tortuoso recorrido hasta el Emsad 78, ¿Sabrá dónde está?

Las jóvenes, con ganas a aprender, de comerse el mundo, de visitar todo lo que sea posible estuvieron en la capital sin apoyo, Martínez Guzmán, asidua a las redes sociales, dio cuenta que estuvo en Campeche y muestra una foto con la (des)gobernadora de esa entidad, Layda Sansores, el 17 de mayo. Luego, el 21, retirándose la envestidura de directora del Cecyteo “volanteó” con la “Brigada violeta” que le ha rendido frutos políticos y “hueso”, en favor de la visita de Claudia Sheimbaun y, en pleno Día del estudiante, estuvo en otro acto político en la presentación de Plan Estatal de Desarrollo.

No hubo viáticos para apoyar a los estudiantes en su visita académica, tampoco tiempo para enterarse que estuvieron por acá y, al menos invitar un café o un refresco en sus flamantes oficinas.

Lo mismo, nos dicen, sucede en el Cobao, con Verónica Hernández González que ayer andaba “de gira” por la costa oaxaqueña, con todos los gastos pagados ¡claro!

Desconocemos si ambas cuenten ya con un diagnóstico para contener la deserción escolar. Para alentar las clases presenciales y retener a sus alumnos. Con planes de estudio, oferta educativa y plantar cara a la tentación migratoria de los estudiantes. Es el momento de “tropicalizar” la educación y sus proyectos para adaptarlos a sus regiones, dado que cada una presenta una problemática particular.

Mucho gusto nos daría saber que sus planteles cuentan con una partida presupuestal para viáticos y apoyos a visitas de estudio, de aprendizaje. Que los apoyan o los van a apoyar con transporte, hospedaje, claro con viajes y visitas bien justificadas, estudiadas y apegadas a sus planes de estudio. 

Ese sería el mejor aporte de Blanca Luz y Verónica para el futuro de la educación, un legado. No las fotos de actos políticos subidas a redes sociales mientras sus alumnos realizan visitas de “pies cansados” para apoyar su preparación académica.

 

¿Tequio?

Somos recurrentes porque asimismo son las autoridades. El tequio se instituyó para apoyar en labores comunitarias proritarias: abrir caminos, construir o acondicionar escuelas, levantar cosechas o deshierbar predios, poner el hombro o levantar al caído.

El tequio no sirve para pintar banquetas en una calle cualquiera para tomarse la foto, brocha en mano.

Se desvirtúa.