Le llueve en su “milpita”
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BARATARIA

Le llueve en su “milpita”

 


Al presidente municipal, Francisco Martínez Neri, le llueve en su milpita.

No ha resuelto el problema de la basura al no hallar un terreno para la disposición de residuos sólidos urbanos de la ciudad de Oaxaca, y ya enfrenta la escandalosa sustracción de 400 unidades de motor en el encierro “Primavera” que se ubica en jurisdicción de la agencia de Santa Rosa Panzacola.

¿Qué significa eso? ¿Que Martínez Neri no está pendiente del Ayuntamiento? ¿Que es otro u otra que dispone de los bienes municipales? ¿Que su equipo sólo está ahí, para cuidar los intereses de grupo o partido? O que en definitiva, ¿hay incapacidad de Martínez Neri para desempeñar dicho cargo?

Uno de los primeros errores de Martínez Neri fue al inicio de su administración, cuando dio a conocer públicamente que recibió una deuda de 386 millones 603 mil 792.19 pesos de su antecesor Oswaldo García Jarquín.

Durante un informe público en el Palacio Municipal, Martínez Neri justificó que por el pago de la deuda, este 2023 tendría limitaciones presupuestales, para atender las necesidades del municipio.

Lo trascendente de ese anuncio es que prometió que se procedería penalmente contra Oswaldo García, lo cual no ha ocurrido hasta el momento.

Luego, le estalló en las manos el problema de la basura, al cerrar los colonos de la Guardado el basurero a cielo abierto, lo que provocó días aciagos para los capitalinos, a causa de la acumulación de miles de toneladas de desechos.

También fueron días difíciles para el exrector de la UABJO, a grado tal que estuvo a punto de tirar la toalla, según lo narran gente cercana a él. Incluso, en una entrevista con medios de comunicación, Martínez Neri confesó que este tema “me quita el sueño”.

Hasta el momento, este problema no ha tenido solución, porque los municipios se han echado atrás, y no quieren basurero en su territorio.

El último caso fue Tlacolula, en donde la propia autoridad municipal emanada del PT, se negó a recibir la basura orgánica que iba a ser arroja en un terreno privado que se ubica en esa población.

Al no conseguirse terreno, Martínez Neri está pagando camiones de carga para transportar la basura que generan los capitalinos hacia otros municipios del Istmo y la Mixteca, así como en territorio poblano.

Los gastos por ello superan los 40 millones de pesos o hasta más, lo que está provocando una descapitalización y si no hay solución, pronto será similar al adeudo que dejó su antecesor, Oswaldo García Jarquín.

La basura le ha representado un desgaste al político oriundo de Zautla, Etla. Por ese caso, ha pasado un año y no hay una obra significativa que caracterice la administración de Martínez Neri, por el contrario, el estiaje está en puerta y los colonos reclaman la falta de agua.

Pero ahorita, lo que tiene enfrente es la sustracción de diversos vehículos del encierro vehicular “Primavera”, propiedad del Ayuntamiento, donde se llevaron 400 unidades de motor, por el cual son investigados seis funcionarios municipales, los cuales han sido separados de su cargo, mientras duren las investigaciones.

La denuncia sobre este caso, salió de las redes sociales, ¿por qué no del propio Ayuntamiento? ¿Por qué ocultaron ese robo durante mucho tiempo? ¿Lo sabía Martínez Neri? O acaso, ¿le ocultaron la información?

Fuentes consultadas por Barataria, señalan que la dirección de Patrimonio Municipal es la que autoriza la entrada y salida de vehículos del encierro municipal Primavera. Además, hay cámaras de vigilancia en las entradas, por lo tanto, es fácil detectar quién o quiénes y de qué forma sacaron las unidades de ese lugar para, seguramente, darle alguna utilidad.

Es digno recordar que el 3 de enero de 2017 fue detenido el exdirector de Tránsito, Felipe Reyna, acusado de la desaparición de una motocicleta que estaba depositada en el encierro municipal, esto de acuerdo con el expediente, 134/2011/ del juzgado cuarto de lo penal. Tuvo que pagarla, pues la unidad desapareció de manera misteriosa del encierro municipal.

Este jueves, el presidente municipal, todo desencajado, declaró que el caso ya lo ventila la Contraloría Municipal, así como la Fiscalía General de Justicia en donde han ido a declarar los presuntos involucrados.

No daré detalles por la secrecía en la investigación, sostuvo el edil.

Las 400 unidades robadas significan muchísimo dinero. Y quien lo haya hecho merece un castigo ejemplar, puesto que todas estas unidades tienen un dueño que ahora lamenta la falta de confianza mostrada por la autoridad municipal actual.

Muy necesario que este caso se esclarezca para bien del propio munícipe de Oaxaca de Juárez, Francisco Martínez Neri, que le está quedando a deber a la ciudadanía oaxaqueña, sobre, todo cuando se destruye una fuente histórica, que también es patrimonio de los oaxaqueños y del mundo entero.