Al caer la noche y al ritmo de la música de banda, la magna comparsa organizada por el ayuntamiento de la ciudad de Oaxaca inició su recorrido por las calles del Centro Histórico.
Como parte del programa “Oaxaca vive, nunca muere”, las y los participantes se vistieron y caracterizaron para la ocasión, con disfraces o parte de la indumentaria tradicional, pero con los rostros maquillados a manera de catrinas y catrines, personajes que se han asociado con la muerte.
El público también iba vestido acorde a las fiestas, con tocados, disfraces y maquillaje de catrines, diablos, charros y payasos, parte de las caracterizaciones que se acostumbran en las comparsas de estas fechas.
La magna comparsa partió de la avenida Benito Juárez, a la altura del parque el Llano, desde donde el edil capitalino, Francisco Martínez Neri, y la presidenta honoraria del sistema DIF municipal, Bernarda González Rivas, encabezaron el contingente.
Junto a ellos participaron también funcionarios de la administración, entre secretarios y regidores. Además de tener como invitado al edil de Santa Cruz Xoxocotlán, Inocente Castellanos.
En esta magna comparsa se pudieron apreciar a las Chinas Oaxaqueñas, una de las delegaciones que usualmente participan en los espectáculos del Lunes del Cerro.
Pero a diferencia de su participación en las festividades religiosas de la ciudad que han caracterizado, ahora iban ataviadas con faldas y rebozos negros y blancos, tocados de flores naranjas, también con figuras de carrizo en mano, como los faroles de papel celofán que ahora eran decorados por figuras de cráneos o falsas telarañas.
El tradicional “Jarabe del Valle” fue cambiado por “La peinada”, una de las varias piezas que la banda de música ejecutó en el recorrido rumbo a la Plaza de la Danza, y al que se unieron cientos de personas en la avenida Juárez, la calle Abasolo y la avenida Morelos.
