Entre las observaciones y retos que detectaron organismos de la sociedad civil en las elecciones pasadas, se encuentran la violencia política, asesinatos de actores políticos, la influencia del crimen organizado y la intimidación de personas candidatas.
De acuerdo a datos del Centro de Investigación Aplicada y Aprendizaje de la Fundación Internacional para los Sistemas Electorales (IFES), el abuso de recursos estatales durante las campañas, es una constante.
Aunado a que el acceso de algunas candidaturas a estos recursos, declaraciones de triunfos antes de la publicación de los resultados oficiales, así como iniciativas de leyes y reformas electorales.
También habló de la importancia de la prevención de la violencia política y la optimización de las casillas especiales.
Dicho organismo valoró la necesidad del INE de salir a trabajar con los partidos políticos, con los movimientos sociales, organismos internacionales y organizaciones de la sociedad civil, “utilizando y empoderando de manera efectiva su conocimiento y aportación al proceso”, la academia y personas expertas, organismos electorales y gobierno”.
Apuntó que México cuenta con garantías constitucionales, así como con un amplio y progresivo marco legislativo estatal favorable al ejercicio de los derechos políticos de las mujeres.
Reconoció que el INE mediante la aprobación de acuerdos y la implementación de programas y de políticas institucionales específicas, estén orientadas a promover condiciones de igualdad, así como la erradicación de diferentes formas de discriminación.
Dijo que con la visión de observadores se ha contribuido a la transparencia y legitimidad de los procesos electorales, aunado a que la observación electoral es un pilar fundamental en el desarrollo de los procesos democráticos.
“La presencia de observadores internacionales aumenta la transparencia del proceso electoral y fortalece la confianza ciudadana en los resultados, asimismo, actúa como un mecanismo de prevención y detección de posibles irregularidades, asegurando que se respeten las normas y procedimientos establecidos”, externó.
Añadió que la presencia y aportaciones de las y los observadores internacionales son fundamentales para fortalecer la democracia y garantizar que los principios rectores de la función electoral sean respetados.
Por lo cual, los informes y recomendaciones proporcionan una base sólida para la mejora continua de los procesos electorales justos y eficientes.