Al término de su misa de domingo, el arzobispo Pedro Vázquez Villalobos, invitó a disfrutar de julio, un mes de fiesta en Oaxaca con la Guelaguetza a realizarse los lunes 22 y 29.
Además, hizo el llamado a la población a sumarse a la reforestación de los bosques después de los fuertes incendios forestales que azotaron de enero a junio de este año.
Después de la misa, recordó que el gobernador Salomón Jara comenzó, en días pasados, con esta campaña en aquellas regiones que tuvieron grandes afectaciones por el fuego.
Todos quienes viven en Oaxaca deben ser conscientes de cuidar el bosque, si se talan también hay que plantar arbolitos porque en el futuro seguirán embelleciendo los espacios”, dijo.
Cabe mencionar que Oaxaca ocupó los primeros lugares por afectación de bosques en la temporada de incendios.
Ojalá todos tomemos conciencia que es importante plantar un árbol, y si es allá en la montaña, sepamos ser hombres y mujeres de tequio y vayamos a plantar para reforestar y que contribuya a la paz”, ahondó.
Calificó que este proceso es ejemplo de armonía con la naturaleza porque se da vida, oxígeno, atrae el agua y otros beneficios para la población.
Mientras tanto, en este inicio de “Julio, mes de la Guelaguetza”, monseñor pidió disfrutar de los bailes, de la fiesta, de los desfiles de las delegaciones y de las celebraciones que se harán de manera gratuita.
He disfrutado de los diferentes bailables, es bonito ver lo que han vivido los pueblos en varios años y considero que Oaxaca es hermoso”, añadió.
Agradeció a quienes acuden a descansar y conocer este lugar porque el destino por encima de otros muchos.
Pedro Vazquez Villalobos ofrece misa desde la Catedral de Oaxaca todos los domingos y en su mensaje de ayer, habló de la fe que cura a enfermos.
Dios es el que sana, se vale de los médicos, se vale de la oración para darnos la salud, pero a veces nuestro organismo ya está muy deteriorado, muy desgastado y los mismos médicos nos dicen: está viviendo una situación muy complicada, muy difícil, sólo un milagro y esos, sólo los hace Dios”.
Y reseñó los milagros que hizo Cristo, que están plasmados en la Biblia.
