Además de los riesgos por daños a órganos vitales como el hígado y el riñón, la automedicación puede generar una mayor resistencia antimicrobiana y estancia hospitalaria prolongada en determinadas enfermedades.
Argelia Julián Aquino, del Departamento de insumos y riesgos a la salud, explicó que los riesgos de la automedicación se presentan en los extremos de la vida como los menores de edad y personas adultas mayores.
Aunque en la entidad no se cuenta con estadísticas precisas de la incidencia de la automedicación entre las y los oaxaqueños, las autoridades reconocen que la mayoría opta por este a pesar de los riesgos que trae consigo.
La funcionaria de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) destacó que una gran parte de la población consume medicamentos sin prescripción o receta médica ante una enfermedad considerada leve, sin tomar conciencia de los daños que puede generar en el cuerpo.
El automedicarse con antibióticos, dijo, causa una resistencia bacteriana importante que se hace evidente en el tiempo de estancia hospitalaria de los pacientes, sometidos a antibióticos con mayor cobertura para poder hacer frente a las enfermedades como neumonías.
Destacó que la gran mayoría, ante un malestar, busca medicamentos de libre venta que no exige una receta, pese a los riesgos que muchos representan a los órganos vitales del cuerpo como el hígado, el riñón o el corazón, como los analgésicos.
Expuso que en el estado no se cuenta con datos certeros sobre la automedicación en la población oaxaqueña, toda vez que no hay alguna notificación previa por parte de médicos.
“Se sabe de la resistencia antimicrobiana porque se observa que el tiempo de estancia hospitalaria es mayor ante la resistencia a los fármacos para tratar una neumonía, por ejemplo, donde se tiene que dar un antibiótico de mayor cobertura”, explicó.
Aclaró que aunque los antibióticos requieren receta médica para su compra, muchas personas guardan este tipo de medicamentos que les fue otorgado en alguna cita médica, para volverlas a consumir tiempo después sin previa consulta.
De otros medicamentos de libre venta, como el ibuprofeno, expuso que estos deben consumirse con prescripción médica, donde se establece las dosis y horarios de ingesta, a fin de no generar daños o riesgos a otros órganos por su consumo prolongado.