En una década 24 menores de edad han fallecido en la entidad como consecuencia de agresiones, de acuerdo a los últimos registros del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En el periodo 2011-2021, el año con más casos reportados de defunciones infantiles por agresiones en Oaxaca fue 2013 con un total de siete, seguido por 2017 con cuatro y 2012 con tres.
Con dos casos cada uno se notificaron decesos en 2011, 2014, 2015 y 2018, mientras que en 2019 y 2020 se reportó un caso cada uno. En 2016 y 2021 no hubo registros de decesos por agresiones en infantes.
Por entidad, el estado de México encabeza la lista por el mayor número de decesos infantiles por agresiones con un total de 201. Le sigue Ciudad de México con 41; Chihuahua con 38; Baja California y Jalisco con 34 cada uno; y San Luis Potosí y Guanajuato con 32, respectivamente. Oaxaca ocupa el octavo lugar en mortalidad.
Durante la pandemia por Covid-19, diferentes instituciones y organismos como el Sistema DIF Oaxaca o el Sistema local de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), aseguraron que la violencia contra los menores de edad aumentó de manera considerable, sobre todo con el confinamiento.
Incluso en un reciente informe sobre la violencia contra este sector de la población en Oaxaca por World Vision México, se señaló que el 70% de las menores de edad percibió la casa como un lugar violento para ellos.
Así también, un 58% consideró que hubo un incremento de la violencia contra niñas, niños y adolescentes durante los primeros dos años de la pandemia, mientras que el 60% expuso que no estaban seguros todo el tiempo y tampoco en ningún lugar.
Este viernes un menor de cuatro años de edad fue asesinado en su vivienda ubicada en la colonia del Maestro, presuntamente por su padrastro que lo cuidaba cuando la madre salió a la tienda.
De acuerdo a la Fiscalía General de Oaxaca, las primeras investigaciones establecieron que el niño habría sido llevado a una farmacia ubicada en esta colonia para recibir atención médica, pero el especialista se percató que el menor ya no tenía signos vitales y dio parte a las autoridades.
