Oaxaca reportó en 2023 al menos 57 muertes por la enfermedad de Parkinson y 44 por Alzheimer, la mayoría en personas adultas mayores de 75 años de edad.
En Parkinson en lo que va del año, el sector salud de Oaxaca informa de 126 nuevos casos con atención en unidades médicas, de los cuales, 73 fueron en hombres y 53 en mujeres. Este acumulado representa un descenso en los registros, al considerar que en 2023 eran de 144 nuevos en el mismo periodo.
Esta cifra ubica al estado en el lugar 16 de los estados con el mayor número de casos en 2024, encabezado por Veracruz con 596 y Jalisco con 538; en contraste, se encuentran Zacatecas con 18 y Nayarit con 28.
De los 57 decesos por Parkinson en 2023, uno se reportó en el grupo de 25 a 29 años, otro en el de 55 a 59 y otro más en el de 60 a 64. Así también, seis fueron en el grupo de 65 a 69, cinco de 70 a 74; 16 de 75 a 79; 15 de 80 a 84 y 12 de 85 años y más.
La Secretaría de Salud señala al Mal de Parkinson como un trastorno del sistema nervioso central que afecta el movimiento y que ocurre cuando las neuronas no producen suficiente dopamina, una sustancia muy importante para el funcionamiento del cerebro.
“En el desarrollo de la enfermedad de Parkinson intervienen muchas zonas del cerebro. Sin embargo, los síntomas más frecuentes ocurren como consecuencia de la pérdida de neuronas de un área del cerebro conocida como sustancia negra”.
En el caso del Alzheimer, que reportó 44 decesos en 2023, la mayoría en personas adultas mayores de 80 años, el sector salud notificó 73 nuevos casos en lo que va del año, superior a los 48 reportados el año pasado en el mismo periodo.
De esta enfermedad, el sector salud señala que se debe a cambios en el cerebro por la presencia de la proteína llamada beta amiloide que se acumula frecuentemente en el lóbulo temporal. Dicha toxina provoca inflamación y muerte progresiva de neuronas.
“Las características más comunes en la persona con Alzheimer son olvidos de eventos recientes, problemas de lenguaje, alteraciones del pensamiento abstracto, desorientación, cambios en el estado de ánimo, pérdida de habilidades previamente adquiridas como manejar y llevar sus cuentas; olvido de lugares habituales, nombres de personas cercanas y vestirse por sí mismas, entre otras”.