El fiscal general del estado, Bernardo Rodríguez Alamilla, confió en que con una buena reingeniería y acciones concretas se puede evitar y combatir los actos de corrupción dentro de la dependencia.
En entrevista, mencionó que no se debe “cerrar el ojo” a un problema que existe en la Fiscalía, pero desde hace seis meses se ha comenzado a combatir con diversas estrategias.
Frente al director y gerente general de EL IMPARCIAL, Benjamín Fernández Pichardo, sostuvo que a su llegada comenzó con la reingeniería de la Fiscalía General para lograr una reconfiguración total.
Indicó que han efectuado la rotación de personal en todas las agencias del Ministerio Público, vicefiscalías y regiones, además de mover a los agentes estatales de Investigación para terminar con cualquier compromiso adquirido.
Rodríguez Alamilla externó que en la medida que se acabe con la corrupción se ganará una mayor confianza de la ciudadanía, ya que persiste una elevada cifra negra a nivel nacional y estatal.
Estamos atentos a las quejas y denuncias de la ciudadanía, no se toleran los llamados sobornos para que avancen las carpetas de investigación; se acabó, y hay una instancia interna que se encarga del tema”, dijo.
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De igual manera, afirmó que la mayor cantidad de casos se registran en las regiones del estado, debido a que en la ciudad de Oaxaca y zona conurbada es mucho más complicado.
Hemos cambiado personal, lo hemos rotado, buscamos romper esos vicios o inercia que se traían, queremos que se sumen al cambio natural y nueva forma de hacer las cosas”, reiteró.
Si no mandamos un mensaje fuerte y claro al interior de la Fiscalía en el sentido que ningún tipo de acto de esta naturaleza se van a tolerar, las cosas no van a cambiar, enfatizó.
Y ¿qué pasa con los casos que se detectan?, se separa al elemento con respeto a todos sus derechos en lo que se efectúa la investigación y en caso de que sea verídico, se procede conforme a derecho para evitar la repetición de hechos, concluyó.
