Cada año, al menos 18 mil niñas y niños migrantes provenientes de Centroamérica, cruzan el territorio mexicano en busca del sueño americano, de los cuales al menos el 80 por ciento son retornados a sus lugares de origen para evitar ser víctimas del crimen organizado.
Las autoridades migratorias estiman que derivado de la crisis económica que se vive en países como Venezuela y Cuba, además, de la violencia que azotan el resto de las naciones como Guatemala, Honduras y el Salvador, y de la crisis social en Nicaragua, el número de infantes que pasan por México aumentó hasta en un 50 por ciento.
Una de estas familias, es la de Beatriz, quien lleva consigo sus cuatro hijas e hijos, la más grande de 11 años de edad, le sigue otro de nueve, después otra de cinco y la más pequeña de dos años de edad.
Llegaron hace una semana a la ciudad de Oaxaca, provenientes de Venezuela, no sin antes enfrentar una serie de obstáculos desde el clima, hambre y ante el temor de ser detenidos y deportados por los agentes de migración.
Si nos da mucho miedo, sobre todo porque vengo con mis hijos y todos son menores de edad, pero cuando uno sale de casa ya no hay vuelta atrás, a seguirle y a superar cualquier obstáculo porque nuestro objetivo es llegar a la frontera norte”.
Mientras la madre de familia pide la solidaridad de la sociedad oaxaqueña en calles de la ciudad capital, su esposo busca trabajo para poder obtener un poco de recursos económicos para así continuar con su camino hacia el centro del país.
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Los menores se colocan en las esquinas portando pancartas con la leyenda “apóyame con lo que puedas por favor. Gracias”, por lo que tienen la esperanza de recaudar un poco de dinero para poder continuar su trayecto.
En el camino no se piensa en qué fecha estamos, mucho menos en qué lugar estamos, solo sabemos que es México, pero no sabemos cuánto nos falta para llegar a la frontera, en Venezuela el Día del Niño se celebra en julio, pero ahora no pensamos en eso, solo en llegar con bien”, detalló la madre de familia.
Al igual que la familia de Beatriz, miles de niñas y niños venezolanos recorren las calles del estado de Oaxaca, todos tienen como destino la frontera norte, sin embargo, a su trayecto enfrenta las inclemencias del tiempo, la inseguridad y la apatía de las autoridades para brindarles apoyo.
