Representantes de organizaciones que integran el Observatorio Ciudadano Comunitario del Agua y Medio Ambiente de los Valles Centrales de Oaxaca (OCCAMA) señalaron que proyectos como la presa Paso Ancho, ahora denominada Margarita Maza, ya fracasaron en sexenios anteriores, pero se están imponiendo nuevamente desde el gobierno estatal.
Además, denunciaron que falta la regulación sobre el uso del agua en la ciudad de Oaxaca, pues se beneficia a sectores como el hotelero y no a la población.
Este jueves, durante una jornada informativa en el zócalo de la ciudad de Oaxaca, Nadir Hernández Quiroz, del Centro de Derechos Indígenas Flor y canto, asociación civil, explicó que proyectos como las presas son inviables y que esto ya ha quedado comprobado en el estado.
“Se ha documentado que las grandes presas o represas tienen un tiempo útil de vida entre 30 y 50 años y después de eso, lo que se preveía como una solución a largo plazo, deja de ser útil”, comentó el activista junto a Mauricio del Villar Zamacona, del Foro Oaxaqueño del Agua.
Al señalar el proyecto de la Presa de Paso Ancho, renombrada como Margarita Maza, Hernández Quiroz explicó que el gobierno estatal pretende traer el agua de la Sierra Sur, de la zona de Sola de Vega a la ciudad de Oaxaca.
“Sin embargo, tenemos que pensar que en la ciudad hace falta una fuerte regulación de la extracción de agua y habría que pensar por qué no se ha tomado esta medida para identificar tomas clandestinas y que solamente aprovechan de manera indiscriminada sectores como el hotelero, el industrial y sectores de propiedad privada que siempre han tenido beneficios sobre la ciudadanía”.
La participación del Centro de Derechos Indígenas Flor y Canto y del Foro Oaxaqueño del Agua fue durante la jornada informativa que se realizó ayer en la capital oaxaqueña a la par del paro indefinido de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación en la Ciudad de México.
En la capital oaxaqueña, Nadir llamó a la población a analizar los costos y beneficios de proyectos como la Presa Margarita Maza (antes Paso Ancho), pues esta propuesta ya se había hecho con el gobierno del PRI y luego con el ex gobernador Gabino Cué Monteagudo, pero que no avanzó por incumplimiento en la normatividad ambiental y por la opacidad en los recursos invertidos.
“Se perdieron más de 600 millones de pesos. Es importante apelar a la memoria para que nos demos cuenta que proyectos que se están reviviendo y fueron un fracaso pueden tener un mismo resultado ahora”.
Nadir también expuso que frente a los problemas del agua también hay otras aristas por revisar, como el que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) carece de un sistema para verificar que el volumen de agua que se extrae en las concesiones que otorga.