Daño a la salud al perder 2% de agua corporal; fatiga, síntoma
Exhortan a la población a consumir agua constantemente; en riesgo, personas que presentan obesidad, diabetes e hipertensión arterial
El descenso de al menos 2% de agua en el cuerpo puede causar daños en el cerebro y otros órganos vitales, además de la pérdida de razonamiento, problemas en la vista, fatiga y sueño, entre otros factores.
Miguel Ángel Durán Santiago, coordinador de Salud Pública del IMSS en Oaxaca, explicó lo importante que es el consumo constante de agua ante las altas temperaturas, donde se han reportado cinco casos de golpe de calor y uno de deshidratación en el Estado.
Expuso que durante estos días calurosos, “lo recomendable es beber de seis a ocho vasos de agua diarios, ya que posibilita el transporte de nutrientes a las células, ayuda a la digestión al diluir los nutrientes de los alimentos y contribuye a regular la temperatura corporal mediante la evaporación por la piel”.
Tomar varios litros de agua al día, también permite que el intestino absorba parte de este líquido y por lo cual es posible eliminar todo lo que el cuerpo no necesita, a través de las secreciones y de la orina; así también, previene el estreñimiento.
Te puede interesar: Piden a escuelas evitar actividades de 11:00 a 16:00 horas al aire libre
Durán Santiago pidió a la población evitar bebidas gasificadas, porque además de no contener ningún valor nutricional, solo aportan calorías vacías que reemplazan a las de los alimentos más nutritivos.
Dijo que en temporada de calor los padecimientos ocasionados por deshidratación aumentan considerablemente, siendo el más común el agotamiento o colapso por calor, el cual se produce a consecuencia de la pérdida excesiva de líquidos o sodio.
El especialista llamó a la población a acudir a su Unidad de Medicina Familiar (UMF) o centro de salud más cercano de presentar algún problema de salud por deshidratación o golpe de calor, a fin de ser atendido por un profesional de la salud y recibir el tratamiento correspondiente.
Ante esta temporada de calor, los grupos más vulnerables son los menores de edad, personas adultas mayores, mujeres embarazadas y con enfermedades crónico degenerativas como obesidad, diabetes e hipertensión arterial.
