En una década, 200% más divorcios
Promedio de edad para enlazarse: 34.1 años para hombres y 31.2 para mujeres
En una década Oaxaca mostró un aumento de más del 200% en el número de divorcios, mientras que en matrimonios tuvo una disminución de más del 43%, de acuerdo con los registros del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En el marco del Día del Amor y la Amistad a celebrarse este 14 de febrero, las estadísticas mostraron que en 2012 Oaxaca tuvo un registro de 782 divorcios, que se elevó a los 2 mil 599 en 2022, ocupando el vigésimo cuarto lugar de los estados del país con el mayor número de casos. Las principales causas fueron mutuo consentimiento e incausado.
Mientras en matrimonios, la entidad oaxaqueña se posicionó en el décimo noveno lugar en el ámbito nacional con 11 mil 798 registros en 2022, inferior a los 20 mil 922 que mostraba una década antes (2012).
En 2022, de acuerdo a la última actualización de datos del Inegi, Oaxaca no reportó casos de matrimonios entre personas del mismo sexo, al igual que otras tres entidades. Mientras, en el resto del país, se tuvo un registro de 5 mil 829: 2 mil 353 entre hombres y 3 mil 476 entre mujeres.
En el ámbito nacional, en 2022, el Inegi señaló que las estadísticas de nupcialidad registraron 507 mil 052 matrimonios. De estos, 98.9% fue entre contrayentes de diferente sexo y 1.1 % entre contrayentes del mismo sexo.
La edad promedio de los hombres y las mujeres al unirse en matrimonio fue de 34.1 y 31.2 años, respectivamente. En los matrimonios heterosexuales, el hombre tenía más edad que la mujer en 65.2 % de las uniones. En 23.1 %, él era menor y en 11.4 %, ambos tenían la misma edad”.
Así también, la dependencia expuso que más de la mitad (53.0 %) de las parejas heterosexuales contaba con la misma escolaridad al momento de casarse. En 20.2 % de las parejas, él tenía menos estudios que ella y en 17.8 %, él contó con más formación.
Otro rubro a tomar en cuenta fue la condición de actividad económica: en 52.0 % de los matrimonios, ambas partes trabajaban; en 38.6 %, él trabajaba y ella no; en 1.6 % de las parejas, ninguna de las partes laboraba y en 0.8 %, él no trabajaba, pero ella sí”, destacó.
