Pide Arzobispo abrir los brazos para recibir a los visitantes

En el marco de la máxima fiesta de las y los oaxaqueños, el Arzobispo de Antequera Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos, pidió a las y los ciudadanos abrir los brazos para recibir a los visitantes que arriban la Verde Antequera para admirar la cultura que se expone en las fiestas de la Guelaguetza.

En las alegrías necesitamos elevar nuestro pensamiento a Dios para darle gracias y para alegrarnos con él por lo que nos permite vivir. Hoy podría decir que nosotros estamos en un mes de mucha alegría, de mucho gozo, de mucha fiesta. Así es el mes de julio en nuestro Oaxaca, lleno de fiesta, en diferentes momentos del día y en diferentes días.

 

Por este tiempo, recibimos a muchos hermanos nuestros que vienen a vivir la alegría de los oaxaqueños y tenemos que darle gracias a Dios por ello, porque nos permite alegrarnos y abrir nuestros brazos y recibir a los visitantes y porque sabemos que la presencia de todos esos hermanos, le dan de comer a miles de familias, porque esta tierra nuestra de Oaxaca, vive por la presencia de los visitantes, que dejan aquí recursos.

Al encabezar la homilía dominical en la Catedral de Oaxaca, el Arzobispo de Antequera también pidió a las y los feligreses, darle gracias a Dios “porque tenemos un trabajo y sólo le dan gracias a Dios los humildes y sencillos de corazón. Sé que lo hace usted. Le tenemos que darle gracias a Dios por la salud, pero también le tenemos que dar gracias por la enfermedad, porque son momentos que vivimos”.

Le agradezco a Dios que podamos compartir este momento de nuestro domingo, participando de la Santa Misa, dedicándole con profunda fe y piedad este momento a Dios. También le quiero agradecer a Dios, porque si usted está aquí, es porque hay en su persona la humildad de corazón. Sólo los humildes buscan a Dios, los soberbios no buscan a Dios, porque se creen saberlo todo y poderlo todo”.

Por ello, reiteró su llamado a los creyentes para que no dejen de ser humildes, “no dejen de ser sencillos, porque Dios quiere hacer obras grandes y maravillosas en su persona, dejen a Dios que haga maravillas en su ser, déjenlo, no le impidan, no pierdan la sencillez y la humildad de corazón, no la pierdan, porque necesitaremos siempre de Dios para salir adelante, en tantos detalles de la vida”.