Felicita Poder Judicial del Estado a madres trabajadoras
El magistrado presidente Eduardo Pinacho Sánchez reconoció la importante labor que desempeñan dentro de la institución administradora de justicia
El titular del Poder Judicial del Estado, magistrado Eduardo Pinacho Sánchez, reconoció el trabajo y la valiosa aportación de las madres de familia que forman parte del personal que labora en las diferentes áreas de la institución, por su papel como profesionistas, colaboradoras y proveedoras de sus hogares.
Con motivo del Día de las Madres, que en México se conmemora el 10 de mayo, el presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura enalteció el papel de la mujer como cuidadora de las familias y las primeras transmisoras de los valores esenciales, en especial de quienes contribuyen cada día con esfuerzo y dedicación en la administración de justicia de la entidad.
Asimismo, les externó su agradecimiento por la importante labor que desempeñan dentro de la institución y en la entidad ya que no solo tienen la responsabilidad de acudir a brindar su mejor esfuerzo en el ámbito laboral, sino la de cuidar y velar por sus hijos y por su hogar.
En este marco, el Poder Judicial del Estado participó en los festejos conmemorativos ofrecidos a las madres trabajadoras donde se les reconoció su fortaleza para desempeñarse con responsabilidad en el hogar y en el trabajo, fomentando el desarrollo institucional y social de la entidad.
Asimismo, con motivo de esta fecha, el Tribunal Superior de Justicia y el Consejo de la Judicatura reafirman su compromiso de garantizar una impartición de justicia humanizada y con perspectiva de género; para lo cual ha emprendido diversas actividades en coordinación con dependencias y organizaciones de la sociedad civil, encaminadas a sensibilizar al personal sobre la importancia de prevenir, atender, sancionar y eliminar la violencia hacia las mujeres y niñas.
En atención a un tema de alta sensibilidad, recientemente la institución inauguró el Laboratorio de Genética Molecular que reducirá el tiempo de la prueba pericial de ADN, de un año y medio o dos años, que era el tiempo que normalmente duraba su desahogo desde la toma de muestra de sangre hasta la emisión del dictamen, a solo un mes, con la consiguiente celeridad en la resolución de los conflictos de paternidad.