El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca hizo un llamado a los Reyes Magos a evitar accidentes con la entrega de regalos, porque algunos pueden representar un peligro para las y los menores de edad.
La jefa de Prestaciones Médicas de esta institución, Martha Escobar Vázquez, recordó que de acuerdo con las regulaciones actuales, los juguetes destinados a niños menores de ocho años deben estar libres de bordes agudos de metal o vidrio, así como de materiales tóxicos que ponen en riesgo la integridad física de los pequeños.
Explicó que los juguetes que requieren de dardos, flechas o proyectiles de algún tipo como pistolas y rifles, deban tener puntas inofensivas (de goma, corcho u otro material protector). De preferencia, dijo, no deben regalar este tipo de juguetes porque además de fomentar la violencia entre los niños, pueden causar lesiones, especialmente en los ojos.
En muñecos de trapo y peluche, recomendó a los Reyes Magos vigilar que estos tengan sus decoraciones bien fijas, como son los ojos, nariz, botones, lazos o cordones, ya que pueden ser jaladas o mordidas e incluso tragadas por los infantes.
Para los menores de tres años, los obsequios no deben contener piezas muy pequeñas, para evitar que sean tragadas o inhaladas; también debe vigilarse que éstos no tengan puntas o sean muy pesados”.
Si los juguetes que reciben los menores necesitan de un espacio amplio para utilizarlos, como patines, bicicletas y patinetas, hay que enseñarles su manejo y acompañar a los niños a parques o sitios adecuados para que puedan disfrutarlos con toda seguridad y con ello prevenir accidentes.
Es muy importante asegurarse que lleven equipo de protección como casco para proteger la cabeza, así como rodilleras y coderas, ya que así se reducen las posibilidades de un daño ante una caída y como consecuencia evitar alguna lesión que amerite hospitalización”.
Advirtió que los juguetes eléctricos deben ser únicamente para mayores de ocho años y que se les debe enseñar la manera de usarlos; debe procurarse siempre que sea bajo la supervisión de un adulto.
