Vecinos se quejan de ruido excesivo en terrazas y farmacias
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Vecinos se quejan de ruido excesivo en terrazas y farmacias

El ruido que originan los establecimientos es mayormente perceptible por las noches


Vecinos se quejan de ruido excesivo en terrazas y farmacias | El Imparcial de Oaxaca
Municipio no puede actuar de oficio, argumenta; no da cifra de sanciones

Negocios que van de los informales hasta los del ramo restaurantero y de farmacias son quienes han generado molestias entre los habitantes del primer cuadro de la ciudad ante la alta contaminación auditiva que generan.

A decir de vecinos que habitan en las cercanías de restaurantes con servicio de terraza y bar reiteraron su queja, dado el alto ruido que se genera a lo largo del día, pero es mayormente perceptible por las noches.

Un ejemplo de ello es quienes habitan sobre la calle de Aldama, Las Casas, Bustamante y Rayón, dado que han manifestado su molestia por el ruido que se genera en los comercios aledaños, principalmente farmacias.

Lo anterior es porque en su “estrategia” de promoción de productos o para atraer a los clientes, los empleados sacan sus bocinas y ponen música para ambientar el negocio, en lo que anuncian las ofertas del día.

Dicha situación ha causado el enojo de los colonos, debido a que a lo largo del día, incluso después de las 19 horas, dichos comercios mantienen sus bocinas sobre las banquetas y con la música a un volumen alto.

No obstante, no es el único giro comercial que genera contaminación, sino también las terrazas con servicio de restaurante o únicamente aquellas que funcionan como bar, con música a todo volumen.

Aquí sobresalen las quejas de los vecinos de la calle de Reforma, Manuel Bravo, Murguía, Abasolo y Morelos, en donde los propietarios de los inmuebles han convertido sus azoteas en modernas terrazas.

Sin embargo, personal del área de Medio Ambiente del ayuntamiento capitalino expuso que no pueden actuar de oficio, por lo cual los ciudadanos afectados deben interponer su queja con los datos del domicilio que contamina.

Posteriormente, programan una visita de inspección y miden los niveles de música con la que opera el negocio para valorar, y en caso de que rebase lo permisible, se hacen acreedores a una multa.

Evitaron revelar en lo que va del año de la presente administración el número de multas o sanciones que impusieron a comercios de diversos giros por contaminar el ambiente con ruido.


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