Rechazan militarización de zonas arqueológicas
No aceptan las fuerzas federales, aunque no descartan apoyo para salvaguarda de bienes
Ante la posibilidad planteada por el Ejecutivo Federal para que la Guardia Nacional (GN) custodie zonas arqueológicas como Tajín o Teotihuacán, el sector Oaxaca del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores de la Secretaría de Cultura (SNDTSC) dijo estar en contra de tal pretensión.
Así como diversos miembros del cuerpo docente y de investigación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) han mostrado su desacuerdo, empleados de las zonas arqueológicas de Oaxaca señalan estar en contra de la militarización.
Omar Bautista García, secretario general del SNDTSC Sector Oaxaca, señaló que la postura es la misma que a nivel federal, es decir, de una negativa a que esto suceda. Sin embargo, aún esperan el comunicado institucional del director del INAH, Diego Prieto, respecto a este proyecto o programa del presidente Andrés Manuel López Obrador. Y así pronunciarse con mayor claridad.
Bautista recordó que inicialmente se la idea era de colaboración de este tipo de fuerzas ante el problema del saqueo del patrimonio cultural y de invasiones en zonas, sitios y monumentos. Pero lejos de una participación que afecte la labor de sus compañeros trabajadores, quienes ya desempeñan funciones en las áreas abiertas al público y en atención al visitante.
Pero aún no está clara la forma en que se contempla la intervención de la Guardia Nacional, apunto Bautista García. Lo que se esbozaba, dijo el representante, era que las fuerzas federales ayudaran para evitar saqueos e incluso que se llegue a subastas de piezas en otros países.
De ser así, indicó que sí se podría contemplar la colaboración. Y es que recordó que el saqueo de bienes e invasiones son problemas que afectan la salvaguarda del patrimonio en el país.
Oaxaca, estado en el que hay zonas como Monte Albán, Mitla, Yagul, entre otras, no es ajena a los saqueos. Omar Bautista dijo que en los recorridos han detectado elementos que dan cuenta de saqueo, destrucción del patrimonio y otras afectaciones en sitios como Monte Albán.
