Confía la empresa minera Cuzcatlán en renovación de permisos en Ocotlán

En todo el territorio oaxaqueño existen alrededor de 200 plantas tratadoras de aguas residuales; sin embargo, el 99 % se encuentran inservibles y abandonadas por las autoridades municipales, estatales y federales.

Una de las pocas que aún opera en la entidad es la que se ubica en el municipio de Ocotlán de Morelos, misma que es financiada por la Compañía Minera Cuzcatlán con un costo de 300 mil dólares al año, explicó el director de la compañía, Luiz Camargo.

Al referirse sobre el proceso de solicitud de nuevas Manifestaciones de Impacto Ambiental (MIA) destacó que a la fecha existen dos trámites: “El primero es la ampliación de vigencia de la manifestación de impacto ambiental original de 2009, que vence en el 2021, en paralelo también estamos por regularizar las observaciones que nos realizó la Profepa sobre una inspección que se realizó en el 2017”.

Agregó: “Estamos confiados en que juntos con las autoridades de la Semarnat podemos aclarar estas observaciones y que muchos actores promueven difamaciones. Eso nos preocupa porque de no otorgar este permiso están en riesgo mil 200 fuentes de empleo y 6 mil empleos indirectos”.

Sin embargo, dijo que a través del diálogo con el Gobierno Federal buscan que la Semarnat atienda la solicitud para la ampliación del permiso original y las observaciones que ya fueron atendidas y enviadas a las autoridades.

“La renovación de la MIA original se tendría que dar el 23 de octubre, y para la regularización de las observaciones no hay fecha. De estos temas hay una campaña de difamación que nos dicen que no cuidamos el medio ambiente, pero queremos decirle a la gente que solo utilizamos dos fuentes de agua que vienen de las lluvias y de la planta tratadora de aguas residuales de Ocotlán de Morelos, donde tenemos un contrato en comodato”.

“Con los estándares de Conagua tratamos el agua de la planta que antes era tirada al río Salado, la cual lo contaminaba, y ahora parte de ella se utiliza para el riego. Operamos una de las tres plantas de tratamiento eficientes en el estado, en donde realizamos una inversión de 300 mil dólares al año, es una inversión invaluable porque se cuida el agua y el medio ambiente”.

Luiz Camargo detalló que además de tener solo dos fuentes de agua, “tenemos cero descargas porque el agua que ingresa a la mina se reutiliza en un 70 %, no se puede tener el 100 % porque el 30 % se evapora”.

“El material que utilizamos son rocas que salen de la tierra, se pasa por el proceso de flotación que no tienen un producto químico agregado, es inerte porque no tienen ningún químico adicional que cambie al producto y el material seco, se va a jales secos. La empresa empezó con el proceso húmedo y se cambia a proceso seco y los almacenamientos hoy se utilizan para la captación de agua de lluvias”.

El directivo dijo que actualmente la mina tiene cinco años de vida comprobable, “nos gustaría extendernos los años que sean posibles para poder aprovechar las reservas existentes porque la minería es una de las tres principales industrias de Oaxaca, está la cervecera en Tuxtepec, la cementera en el Istmo y cualquiera que deje de operar va a causar una disfunción esencial. El 70 % de los trabajadores de Cuzcatlán son de las comunidades aledañas”, afirmó.