El estado de Oaxaca se encuentra fuera de los primeros lugares de las entidades en donde se han dado pasos importantes hacia el uso de vehículos eléctricos, dado que las cifras de ventas son mínimas.
Y es que de acuerdo al Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros (RAIAVL) del INEGI, al mes de mayo se tenía registrado la comercialización de solo 39 unidades híbridas.
De acuerdo a las cifras reportadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en la entidad son escasas las personas que han optado por una unidad híbrida no conectada para su desplazamiento.
Contrario a esto, el Estado de México encabeza las entidades en donde se comercializan más los automóviles eléctricos o híbridos, al vender cerca de 22 autos eléctricos y 508 híbridos, siguiendo la Ciudad de México con 20 unidades eléctricas y 943 híbridas.
A su vez Jalisco sigue en el top five con 7 vehículos eléctricos y 431 híbridos, Nuevo León aparece con 5 automóviles eléctricos y 348 amigables con el medio ambiente o menos contaminantes.
En general, el RAIAVL tiene registrados a nivel nacional ventas de 4 mil 376 unidades de motor eléctricos e híbridos, tanto conectados como no conectados, de los cuales 69 son totalmente eléctricos.
Y es que también el Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros ofrece datos mensuales por empresa referentes a la venta, producción y exportación de las unidades vehiculares nuevas, sin especificar valores monetarios.
Según autoridades ambientales en el estado, los niveles de contaminación en las zonas urbanas han ido en constante crecimiento y de no reducirlos valoran poner en marcha algún programa para la reducción de contaminantes.
De acuerdo al sector automotriz en el país, se espera que, en un periodo aproximado de tres años, la comercialización de autos eléctricos logre acaparar al menos el 25% del mercado, lo que provocará un cambio importante en el tipo de energía que se estará consumiendo.
Esto, pese a la pandemia de Covid – 19, y la falta de semiconductores para la fabricación de autos de alta gama, dado que la venta de este tipo de unidades no ha dejado de crecer en México.
