Boleros, damnificados por retiro de ambulantes

A más de una semana del operativo contra el ambulantaje, diversas calles de la ciudad de Oaxaca se han conformado en nuevas áreas comerciales, en donde se expenden textiles, semillas, bebidas alcohólicas, antojitos, accesorios, además de ofrecer tatuajes temporales, entre otros servicios y productos. 

Vialidades que hasta el 15 de julio eran para el tránsito vehicular y peatonal han albergado la protesta de diversas organizaciones como Renacimiento y la Unión Libre Margarita Maza de Juárez, que exigen al ayuntamiento capitalino el pago por sus asignaciones de cuenta y un diálogo con las autoridades municipal y estatal.

La protesta ha transformado en zonas comerciales a diversas cuadras de calles como Las Casas, Flores Magón, Trujano, Hidalgo y 20 de Noviembre. Y aunque en los accesos de estas vialidades hacia el zócalo y la Alameda de León se encuentren los módulos de la policía municipal, algunos puestos han logrado evadir las restricciones en la calle Flores Magón. 

A la par de la presencia de puestos de desplazados triquis, que han quedado al margen del operativo, ayer se constató la presencia de otro grupo de comerciantes. Asimismo, algunos puestos colocados frente al cerco policiaco han aprovechado las vallas para apoyar sus estructuras.

En esta parte de la ciudad, la mayor parte de los puestos ha cercado las inmediaciones y accesos al mercado Benito Juárez, además de abarcar las banquetas de calles. 

Boleros se ven obligados a ocupar otras calles

Desde el domingo pasado, decenas de aseadores de calzado que solían prestar sus servicios en el zócalo y la Alameda de León han tenido que buscar nuevos espacios para atender a la ciudadanía. Los boleros, que aseguran contar con el permiso para prestar sus servicios, se han colocado en las calles Hidalgo y 20 de Noviembre.