Manoseo a la Constitución desequilibra a poderes

El presidente de la Barra Mexicana, Colegio de Abogados de Oaxaca, Jorge Franco Jiménez, consideró que las reformas a la Constitución que impulsa el Gobierno federal no solo alteran el orden jurídico, sino también profundizan en el desequilibrio entre poderes.

Expuso que algunos de los riesgos que corre el país es que se minimicen los derechos humanos, al incrementar las restricciones en el ámbito de libertad y los derechos del gobernado.

“Antes decían: nada sobre la Constitución ni sobre la ley;  ahora parece que las cosas puedan darse al revés, donde la Constitución y la ley abajo, y la voluntad del poder arriba, ese es uno de los problemas graves al que se puede llegar”, destacó.

El abogado expuso que desafortunadamente las reformas a la Constitución no pueden ser combatidas por la vía de amparo y tendrían que buscarse otros métodos en el ámbito internacional a través de la Comisión de Derechos Humanos de Costa Rica, para cuestiones de convencionalidad.

Luego de señalar que las reformas legales que ha impulsado la Federación han sido controvertidas, como la operación de la Guardia Nacional, Franco Vargas recordó que en Oaxaca ya se reproduce esa forma de actuar.

“En Oaxaca los diputados no ejercen su facultad para elegir magistrados del Tribunal y el Gobernador hace uso de una facultad que le confiere la Constitución y los designa de manera directa. Esto altera el orden jurídico y sobre todo la división de poderes, porque pone en manos de los ejecutivos un elemento fundamental que es la justicia”.

Consideró que la forma de operar del Gobierno federal, como lo sucedido en Oaxaca, lesiona profundamente el sistema de la división de poderes y “quien designa tiene la mano de mandar a quienes designan”.

“Yo no dudo de la capacidad de los designados, pero el procedimiento deja poco en que confiar y en un sistema como el que tenemos, además de que lesiona gravemente la autonomía del Poder Judicial”.

Al considerar que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, estaría centrado en erosionar la capacidad de la Corte para transitar con sus reformas legales, sin obstáculos, el abogado señaló que lo grave es que la autoridad no hace lo que la Constitución mandata, sino “que hace que la Constitución diga lo que él quiere”.