Hubo más muertos por Covid-19 que por homicidio en 2020
La pandemia ha superado la capacidad de atención en los hospitales lo cual ha agravado la crisis.
De acuerdo con los registros de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) y del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), los decesos por Covid-19 superan la tasa de homicidios en el 2020.
La emergencia sanitaria que inició el 14 de marzo del 2020, cobró la vida de dos mil 126 oaxaqueñas y oaxaqueños, mientras que del 1 de enero al 31 de diciembre del 2020, se contabilizaron mil 641 víctimas de homicidios, es decir, la pandemia mató a más personas en menos tiempo (solo nueve meses).
En el reporte mensual hasta el 31 de diciembre del 2020, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, informó que de esta cifra de homicidios, 802 corresponden a homicidios dolosos y 845 homicidios culposos.
El mes más violento durante el 2020 en la entidad oaxaqueña fue enero, cuando aún no iniciaba la emergencia sanitaria en el que se registraron 91 homicidios dolosos, en febrero fueron 56, marzo 83, abril 73, mayo 76, junio 57, julio 62, agosto 70, septiembre 50, octubre 66, noviembre 51 y diciembre 67.
La estadística anual destaca que uno de los delitos que aumentó durante la pandemia fue la violencia familiar con 6 mil 474 denuncias recibidas en la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO).
El mayor número de denuncias se presentaron en los meses de marzo con 650, octubre con 606 y septiembre con 595, en tanto en enero se contabilizaron 499, febrero fueron 574, abril 445, mayo 463, junio 421, julio 527, agosto 562, noviembre 567 y diciembre 565.
De acuerdo a las autoridades de procuración de justicia, la violencia familiar se disparó a raíz del confinamiento que generó la pandemia, la gran mayoría de las denuncias se realizaron mediante las plataformas digitales que se implementaron para atender a la ciudadanía.
Añade que los principales denunciantes fueron mujeres e hijos de las víctimas, además de las denuncias anónimas para proteger la integridad de las personas que fueron violentadas durante el año pandémico.
