Migrantes callan síntomas de Covid por temor a despidos
Los que contraen el virus son despedidos; en California han cerrado fábricas por brote de Covid-19
Migrantes indocumentados, prefieren callar y soportar los síntomas del Covid-19 ante el temor de ser despedidos en medio de la desolación que está dejando esta pandemia en Estados Unidos a este sector.
Luis López Reséndiz, un activista pro defensa de migrantes en Los Ángeles, posteó en sus cuentas de redes sociales: “Un excompañero de trabajo me acaba de contar que casi moría de Covid-19. Él es zapoteco de Villa Alta Yalalag, se contagió trabajando haciendo mascarillas en una fábrica, nunca le dijo al encargado del lugar por miedo a perder su trabajo”.
Contactado vía telefónica, el integrante del FIOB informó que esto es noticia nacional en aquel país, e incluso han cerrado fábricas por el brote de los contagios.
“Muchos de sus compañeros no dijeron nada por miedo a perder su único trabajo. Él está ganando dos centavos por cada mascarilla que teje y los amenazan con despedirlos, si es que alguien tiene el virus”.
De acuerdo con el representante, los migrantes indígenas abastecen las fábricas de la costura, y a parte, son víctima del robo de salarios y existe un silencio por parte de las organizaciones de derechos laborales que no quieren comprender la migración de los pueblos indígenas y su presencia en esta industria.
Además, indicó que las autoridades no ejercen el derecho a recursos en lenguas indígenas.
Pero también quienes están laborando en los restaurantes están pasando por esta situación, ya que no se sienten en la libertad de dar a conocer si están enfermos o no.
López Reséndiz indicó que “hay compañeros que están diagnosticados como positivo, muchos no hablan por miedo a perder su trabajo”.
Dijo que la mayoría de las personas que están laborando en las fábricas, estaban anteriormente en otro sectores, como en la comida, los restaurantes o en el sector turístico.
No obstante, al cerrar, regresaron a la costura a trabajar con salarios muy por debajo de lo que debidamente deben recibir por su labor.
“Se ha dado un contagio muy fuerte del Covid-19, son migrantes indígenas y en varios de los casos oaxaqueños”, abundó.
Mientras tanto, las personas afectadas se han rehusado en dar a conocer sus historias o sus casos por temor a sufrir alguna represalia.
“Lo que está pasando es sumamente grave porque muchos son migrantes indígenas porque muchos no saben hablar inglés y se les dificulta”, añadió.