Ven peligro en modificación a Ley de Salud en Oaxaca
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Oaxaca

Ven peligro en modificación a Ley de Salud en Oaxaca

Abogados recalcan que a nivel estatal dicha ley podría fracasar ya que no existen instituciones, ni personal especializado en trasplantes


Ven peligro en modificación a Ley de Salud en Oaxaca | El Imparcial de Oaxaca

Abogados oaxaqueños ven riesgos por la eventual aprobación de reformas a la Ley General de Salud, toda vez que en la entidad se carece de infraestructura en hospitales públicos y personal especializado.

Y es que la víspera, el Senado de la República aprobó reformas a la Ley General de Salud para que los mexicanos mayores de 18 años se conviertan en donadores tras su muerte, no obstante ayer la Cámara de Diputados frenó el dictamen.

De acuerdo al documento enviado a la Cámara Baja, desde el momento de la aprobación todos los ciudadanos serán “presuntos” donadores de órganos y éstos podrían tomarse en caso de muerte, a menos que el individuo haya expresado en vida su deseo de no ser donador.

No obstante, esto es contrario a lo que sucede hoy en día, en donde una persona debe dejar voluntad expresa de que sí desea donar sus órganos, explicó el investigador del Centro de Investigaciones Jurídicas de la UABJO, Juan Manuel Sánchez Moreno.

“La donación de órganos se tiene que ver como un acto de solidaridad humana, de alta generosidad y altruismo, al permitírsele a alguna persona prolongar la vida”, detalló el entrevistado.

El investigador admitió que la demanda supera a la oferta, debido a que en el país hay largas filas de solicitantes de órganos para trasplantes, no como ocurre en otros países de Europa en donde las leyes se acompañan de infraestructura y personal especializado.

Toda persona es disponente de su cuerpo y podrá donarlo, total o parcialmente a menos de que haya manifestado su voluntad de no hacerlo-, cita la reforma a la Ley General de Salud.

Consentimiento presunto, un riesgo

Desde el punto de vista del experto en leyes, con las adecuaciones surge la figura del consentimiento presunto, si no lo hacemos la negativa por escrito, somos donadores en automático y de cierta forma distorsiona la figura del altruismo y generosidad humana.

“Ahí es donde yo veo un cierto riesgo, debido a que es una imitación extra lógica de otros países con mayor desarrollo (Holanda), en donde existen instituciones y leyes muy avanzadas y que no se tienen en el país”, afirmó.

Sánchez Moreno saludó el interés de los legisladores para avanzar en el tema, pero no hay en estos momentos, desde infraestructura hasta personal médico capacitado y protocolos de actuación para operar el tema de donación de órganos.

Incluso consideró necesario reforzar en Oaxaca las campañas de promoción de donación de órganos, como se ha hecho a través de instituciones como la Cruz Roja y actualmente la Secretaría de Vialidad, para poner el rubro en la licencia de conducir.

Pero también advirtió que el Estado estaría invadiendo la esfera privada del individuo al sustituir su voluntad e incurrirse en violación a los derechos humanos de las personas, al no tomar en cuenta su opinión.

Y citó el artículo de Ernesto Garzón Valdez del libro Bioética y Derecho, editorial Fondo de Cultura Económica.

“Muchas personas se niegan a donar sus órganos post mortem, porque temen que en caso de enfermedad grave, los médicos puedan sentirse tentados a aumentar la disponibilidad de órganos, descuidando la atención del paciente y acelerando su muerte”.

Las adecuaciones

Las reformas planteadas se aplicarían a los artículos 320, 321, 324, 325, 326 y 329 de la Ley General de Seguridad y señalan que ahora las personas deberán declararse en contra de que sus órganos sean donados.

Este documento, por el que se exprese el deseo de no ser donador, puede ser público o privado y debe estar firmado por la persona correspondiente.

Anteriormente, los individuos que deseaban conceder alguna parte de su cuerpo debían expresar su petición a través de un documento escrito.

A su vez, Juan José Meixueiro Orozco, presidente de la Barra Nacional de Abogados opinó que las reformas a la Ley General de Salud, para que la donación de órganos y tejidos para trasplantes sea una acción voluntaria y licita, debió ser ampliamente socializada.

“Los legisladores debieron haber creado conciencia en la sociedad para que con esa práctica, se disminuyan las solicitudes de órganos para evitar la muerte de numerosas personas”, manifestó.

La donación de órganos, tejidos, células y cadáveres, consiste en el consentimiento presunto o expreso de la persona mayor de edad para que, en vida o después de su muerte, su cuerpo o cualquiera de sus componentes se utilicen para trasplantes, detalló.

El experto reiteró que el escrito por el que la persona exprese no ser donador, podrá ser privado o público, y deberá estar firmado por este, o bien, la negativa expresa podrá constar en alguno de los documentos públicos o medios electrónicos, que para este propósito determine la Secretaria de Salud en coordinación con otras autoridades competentes.

Falta consenso

Meixueiro saludó la determinación de los diputados federales al frenar los cambios a la Ley General de Salud para que ahora la donación de órganos sea automática, dada la falta de consensos.

Admitió que el argumento no es válido, debió a que ni el sistema de salubridad del país ni la ciudadanía están preparados.

Desde su óptica, un simple cambio en la legislación es insuficiente para transformar la situación de los trasplantes en México, aunado a que existen 4.5 trasplantes en México por cada millón de habitantes.

“El objetivo debe ser fomentar la cultura de la donación de órganos y tejidos, no debe enfocarse a la recolección de ellos, dado que se requieren procedimientos médicos específicos, instalaciones y personal capacitado”, apuntó.


aa

 

Relacionadas: