Este jueves, Hyundai anunció el traslado de los crossover Tucson de México a Estados Unidos, además de la creación de un grupo de trabajo para responder a los aranceles impuestos por el gobierno estadounidense.
Actualmente, las camionetas Tucson se producen en Pesquería, Nuevo León, planean que su fabricación se traslade a su planta en Alabama, Estados Unidos.
La empresa automotora de Corea del Sur también se plantea llevar la producción de algunos autos con destino a EU desde Corea del Sur a otras ubicaciones.
Este anuncio coincide con la presentación de los resultados financieros del primer trimestre de Hyundai donde se reportó un aumento del 2% en sus ganancias operativas, impulsado en parte por la debilidad del won surcoreano.
Guerra arancelaria
La Hyundai anunció la creación de un equipo de trabajo interno para abordar específicamente el tema de los aranceles estadounidenses.
La administración encabezada por Donal Trump impuso aranceles del 25% a los productos importados desde México y Canadá.
La transferencia de la producción del Tucson desde México hacia Estados Unidos es una muestra de la gravedad de estos gravámenes.
Estas tarifas afectan tanto a vehículos construidos en el extranjero, así como a piezas importadas de estos países para ser utilizadas en el ensamblaje de vehículos en Estados Unidos.
Golpe al mercado automotriz
La automotora Hyundai y su filial Kia constituyen el tercer grupo de venta de vehículos más grande del mundo, pero son particularmente vulnerables a los aranceles estadounidenses.
Estas empresas surcoreanas generan aproximadamente un tercio de sus ventas globales en el mercado estadounidense, además, las importaciones representan aproximadamente dos tercios de sus ventas de autos en EU.
Los gravámenes impulsados por Trump han afectado a otras automotoras con presencia en México como Honda, Kia, Mazda, Nissan y Volkswagen que también analizan su proceder ante los cambios en las políticas arancelarias.