A veces, una idea simple, pero puesta en el lugar y tiempo correcto, puede convertirse en algo tan importante como salvar vidas. Así le pasó a una chica de 18 años, a quien se le ocurrió colocar mensajes esperanzadores en el Puente de Wearmouth, en la ciudad de Sunderland, Inglaterra, para disuadir a las personas que saltan hacia el Río Wear para quitarse la vida.
“Incluso en los momentos más difíciles, tu vida es importante. Eres una luz en un mundo oscuro, sólo aguanta”, es uno de los 40 mensajes que Paige Hunter escribió en pequeñas notas y ató a los barandales del puente. Junto con el mensaje, la joven escribió el número telefónico de una línea de ayuda psicológica para personas en crisis.
La distancia entre el punto más alto de la construcción y el agua es de unos 32 metros, el equivalente a un edificio de diez pisos, aproximadamente.
La labor desinteresada de la estudiante de preparatoria logró que seis personas no se suicidaran y eligieran buscar ayuda profesional, según la Policía de Northumbria, que condecoró a Peige Hunter por su trabajo.
“Creemos que es importante aplaudir el trabajo que Paige ha realizado y la ayuda que ha dado a aquellas personas en nuestra comunidad que están pasando por una crisis de salud mental”, aseguró la jefa de la policía, Sarah Pitt.
Cada año, 800 mil personas alrededor del mundo se quitan la vida, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud. Esta crisis de salud mental afecta principalmente a jóvenes de entre 15 y 29 años que viven en países de bajos y medianos ingresos.
