La ciudad indígena número 10 de Oaxaca se encuentra estancada social y económicamente, pues existen pocas empresas con fuentes de empleo que le den la importancia que representa ante los ojos del mundo, por eso no ha crecido como debiera, coincidieron los profesionistas Gilberto Cerqueda y Wily Gallardo, ya que nadie le ha abierto la puerta a la inversión privada y proyectos culturales, agregaron.
Como ejemplo, dijeron que la única novedad es el parque y plaza cívica en Huautla; Casa de Cultura no tiene, nadie promueve los atractivos naturales, sólo uno que otro aficionado a la cultura lo hace por iniciativa propia, y en empleo solamente Banco Azteca y el pequeño banco Acreimex mantienen un poco la economía; el magisterio e instituciones federales resaltan todo el año, y de ahí en adelante barrios y agencias viven marginados.
Otras fuentes indicaron que, con el nuevo gobierno federal y ayuntamientos de la Región Mazateca, jóvenes profesionistas y técnicos buscan empleo y una quincena segura, hasta hoy pocos son los elegidos; por ello, ediles deberían permitir la entrada de empresas como Coppel, Walmart y otras que den facilidades de pago y préstamos económicos con leves intereses, pero munícipes entrantes y salientes sólo están pensando quién los relevará cuando terminen sus mandatos.