Tlaxiaco, entre la zozobra y el vacío de poder

A más de tres semanas del asesinato del edil Alejandro Aparicio Santiago, este municipio enclavado en la Mixteca oaxaqueña sigue inmerso en una profunda división política y un natural reclamo de justicia.

Y aunque algunos ciudadanos apoyan al suplente Gaudencio Ortiz Cruz para que asuma el mandato, colaboradores cercanos no lo reconocen como sucesor legítimo, ya que, aseguran, tiene ligas con el Partido Revolucionario Institucional (PRI).

“Yo lo único que pido en memoria de mi hijo es justicia, que quienes lo hicieron paguen ante la ley”, dice con entereza Don Rey, (Israel Aparicio López), padre del edil asesinado minutos después de su toma de protesta.

Sentado a un lado de la carretilla en donde vacía los granos de maíz ya desgranados, recuerda al único varón de sus 8 hijos, como una persona de palabra, “es algo que yo le inculqué y que nunca incumplió”.

El hombre de 76 años de edad deja en manos de Dios la justicia, como él afirma, no ha salido a buscar al o los responsables y vengarse, “no lo voy a hacer, sólo esperamos que se aplique la ley y se esclarezca el asesinato “.

Acompañado de uno de sus yernos, se distrae con la mazorca obtenida tras duros días de trabajo en el sol y entre los surcos, en donde ha pasado la mayor parte de su vida en Tlaxiaco.

“Yo le inculqué a Alejandro el amor por el trabajo y el respeto por la palabra; muchas veces le dije que dejara la política,pues a mí es algo que no me gusta, sin embargo, me respondía que la gente lo apoyaba e impulsaba”, destaca.

En la casa de patio grande y una capilla a la Virgen de Guadalupe,dice algunas oraciones por la paz de su hijo, asesinado el pasado primero de enero a unas calles de donde había tomado protesta como autoridad municipal.

Su rostro duro y curtido por los rayos del sol en las faenas del campo, esconde una mirada de nostalgia, de profunda tristeza y dolor que como bien dice,ha soportado para no derramar una lágrima.

“Me siento orgulloso del trabajo de mi hijo, porque sé que no defraudó a nadie ni tampoco hizo daño, aquí me voy a morir, con mis otros hijos y los recuerdos de un hijo asesinado”, afirma mientras observa el cuadro del presidente pintado por el artista plástico Ángel León.

“Porque la palabra vale…y lo que se dice se cumple”, reza la leyenda en el cuadro que retrata a Aparicio Santiago con el bastón de mando en la mano.

Afuera dos patrullas, una de la Policía Federal y otra de la Estatal montan guardia de seguridad en los domicilios de la viuda y del padre de un presidente municipal que no cumplió ni 24 horas en el cargo.

Gobierno paralizado
No obstante en el Palacio Municipal se mantienen escasas actividades administrativas para no dejar a la población sin los servicios básicos de agua potable, energía eléctrica, recolección de basura y seguridad.En el arco principal resalta un enorme moño negro en señal de duelo.

Por ejemplo Ángel Osorio Hernández, ciudadano de Tlaxiaco, pide a las autoridades a ponerse de acuerdo y trabajar para dar resultados inmediatos a la población quien exige servicios y programas.

Desde su punto de vista, el ayuntamiento no puede seguir en la parálisis o con vacío de autoridad, pues son pocos los que no quieren el progreso de la Heroica Ciudad de Tlaxiaco.

“Sí pedimos a las autoridades que se aplique la ley a los responsables tanto materiales como intelectuales, pero los concejales no pueden ni deben darle la espalda a los ciudadanos que los llevaron al poder”, subraya.

Solicita a la Secretaría General de Gobierno a intervenir y poner orden en la población dado que no deben enviar a ningún administrador, tomando en cuenta que hay un suplente.

Temor abraza a los cercanos
No obstante entre los colaboradores del edil asesinado hay temor por lo que ocurre en la población y ante cualquier situación de riesgo que los pone en la mira de nuevos ataques violentos.

Con declaraciones bajo condición de anonimato, se muestran inconformes con las pretensiones de regresión del PRI a la presidencia, bajo la figura del suplente.

Quienes caminaron con Alejandro Aparicio desde que contendió la primera vez como presidente municipal, luego para diputado y hace unos meses para primer concejal, quieren que se respete la voluntad del pueblo.

Los ciudadanos votaron por el compañero Aparicio y por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), no por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Instituto con el que identifican al suplente Gaudencio Ortiz Cruz, advierten.

Desconocen su futuro en la administración para la cual trabajaron desde la campaña, sin embargo, de lo que no dudan es que seguirán trabajando en beneficio de su pueblo.

Afirman que no hay ingobernabilidad, sino más bien intereses personales de un reducido grupo para quedarse con el poder en Tlaxiaco, a pesar de no trabajar en la campaña.

Una vida normal se vive en las calles
En un recorrido por las calles aledañas al Palacio Municipal, se observa una intensa actividad comercial, tanto formal como informal, pues más de 100 puestos instalados sobre la vía pública ofrecen sus productos a los transeúntes.

Discos clonados, ropa de moda, tenis a bajo precio, artesanías diversas y comida son las cosas que se ofrecen en el tianguis, situado cerca de donde mataron al presidente municipal el pasado primero de enero, tras rendir protesta al cargo.

Comerciantes consultados evitan las grabaciones, pero no dejan de pedir que se aclaren los hechos y sobre todo que se nombre a la autoridad que se hará cargo de la administración municipal.

“No pueden ocultar que hay vacío de autoridad, unos y otros se están peleando la presidencia, el difunto no ha cumplido ni los 40 días de fallecido y ya quieren el hueso, primero que se pongan a trabajar y luego que cobren”, dice una mujer al otro lado del mostrador.

En su opinión, el Gobierno del Estado o el Congreso deben intervenir para sentar a las partes en pugna y nombrar al sucesor de Alejandro Aparicio Santiago, siempre y cuando haya compromiso de honradez, honestidad y resultados.

Ahorita está todo tranquilo, pero alrato no sabemos ya ve como somos en la Mixteca, dice mientras presume su terquedad y la valentía para concretar las cosas.

Congreso podría intervenir en Tlaxiaco
El Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO) manifestó que la integración de la nueva autoridad municipal en Tlaxiaco, le corresponde al Cabildo con el acompañamiento de la Secretaría General de Gobierno (Segego), luego del asesinato del edil Alejandro Aparicio Santiago y del Síndico Perfecto Hernández Gutiérrez.

La víspera entregaron copia de la Constancia de Mayoría al suplente Gaudencio Ortiz Cruz, quienes llegaron bajo la alianza formada por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Partido del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES).

No obstante, las fuentes consultadas al respecto indicaron que ahora toca al propio cabildo ratificar a Ortiz Cruz como el presidente municipal de la Heroica Ciudad de Tlaxiaco para el trienio 2019 – 2021.

Sin embargo, en las últimas horas Morena realizaba una especie de consulta entre sus militantes en la población enclavada en la Mixteca para decidir sobre el rumbo de la administración que sufrió un severo golpe el pasado primero de enero.

Explican los funcionarios del órgano electoral que en caso de no llegar a ningún acuerdo político, en la población regida bajo el sistema de partidos políticos, podría intervenir el Congreso del Estado.

Pero la población y los propios integrantes del cabildo se han pronunciado en contra de la designación de algún administrador municipal, toda vez que en las elecciones la gente votó por el Movimiento de Regeneración Nacional.