Aunque en las últimas lluvias la cantidad de árboles derribados por estas ha disminuido, protección civil de Oaxaca de Juárez señala que los riesgos latentes son anegaciones o encharcamientos en algunas vialidades de la capital. La causa de que zonas como avenida Universidad, avenida Juárez el anillo Periférico o la carretera antigua a Monte Albán o incluso el centro histórico se aneguen es la contaminación.
Rodolfo Brena, director de Protección Civil, explicó que tras los reportes ciudadanos y recorridos han observado que el agua no fluye en las alcantarillas y calles principalmente por la basura abandonada, la que es arrastrada por las aguas hasta la red pluvial.
En algunos casos como en la carretera del Cerro del Fortín (la federal 190)
El fin de semana y durante los últimos días, las tormentas y granizadas propiciaron varios encharcamientos e incluso inundaciones como la de la carretera antigua a Monte Albán, en San Juan Chaputepec. Ahí, al menos uno o dos vehículos se quedaron atrapados.
Las lluvias de la noche del martes y las fallas en la red pluvial del municipio de Santa Lucía del Camino generaron un problema similar en inmediaciones del Centro Cultural y de Convenciones, una zona donde en cada temporada de lluvias quedan atrapados varios vehículos.
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Pero en la ciudad de Oaxaca las vialidades más propensas a los encharcamientos, que permanecen incluso varias horas o más de un día son la avenida Universidad, avenida Juárez y el Periférico.
En el caso de la carretera del Cerro del Fortín, la dirección refirió que pese a no ser un lugar de tránsito peatonal el problema también ocurre.
Luego de que las tormentas atípicas de abril dejaron cerca de 50 árboles caídos, la dirección señaló que estas afectaciones bajaron considerablemente en la actual temporada de lluvias, en la que se cuentan únicamente tres ejemplares.
Como los encharcamientos, los inmuebles en mal estado son riesgos latentes en la capital. Aunque hasta ahora no han vuelto a tener desprendimientos de acabados o caída de muros, Rodolfo Brena no descartó daños en las próximas lluvias de la temporada.
Sin embargo, aclaró que por tratarse principalmente de bienes catalogados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia y de propiedad particular (incluso intestados) cuya restauración es responsabilidad privada, la autoridad local no puede intervenir.
