Entre los cientos de puestos de antojitos y juegos mecánicos, cientos de familias oaxaqueñas acudieron al templo de Nuestra Señora de Guadalupe para agradecer y pedir favores a la imagen. Como una tradición y costumbre que han mantenido en sus familias, varias llevaron a sus hijos y nietos caracterizados del santo Juan Diego y de “Lupitas”, en alusión a la virgen.
Este es el segundo año en el que en medio de la pandemia las familias volvieron al templo para venerar a la “Morenita del Tepeyac”, luego de que en 2021 se retomaron los festejos.
Los puestos de flores, de artículos religiosos y aquellos con escenarios para la foto del recuerdo no faltaron en este primer día en el que se acostumbra la visita a la virgen.
Debido a que aún persiste la pandemia de Covid-19, el acceso al templo fue controlado y con medidas sanitarias como el uso obligatorio de cubre bocas.