Sobrepoblación de flora afecta al arbolado de parques de la ciudad de Oaxaca

Aunado a las plagas y la falta de agua en temporadas como la de estiaje, el deterioro del arbolado urbano en Oaxaca de Juárez se debe también a una sobrepoblación, según señala el subdirector de Medio Ambiente Municipal, Clemente Jesús López.

Después de confirmar la muerte de tres flamboyanes ubicados en una de las jardineras del exconvento de Santo Domingo de Guzmán, el funcionario explicó que entre las afectaciones que sufren los árboles en parques de la capital se debe a la sobrepoblación. Es decir, a la presencia de más ejemplares que los que se debe tener en cierta área, como sucedió con los flamboyanes, que requerían de un espacio más amplio y un área con más nutrientes para no competir.

La sobrepoblación, refiere, se debe en parte a que “la gente va y planta arbolitos, a veces sin orden y sin conocer la especie, simplemente porque quiere que se vea verde. Y tienen razón, pero eso también genera mucho caos”.

El funcionario adelanta que se prevén cambios de árboles en espacios públicos de la ciudad, aunque también reconoce la incapacidad para atender este tipo de lugares ahora, debido al estiaje, la pandemia y la falta de personal.

Si en un sitio hay un árbol grande y se plantan dos chicos bajo él, ejemplificó, esto condena a que los menores “se vayan chueco, busquen el sol y no se permite un desarrollo sano”. Al final, dijo, es un problema porque las ramas de los árboles se van sobre parte del arroyo vehicular y con el paso de los camiones estos las destrozan.

Sobre los sitios en donde hay árboles muertos o sin posibilidad de rescate, menciona que está la calzada del Panteón, donde hay varias jacarandas afectadas por muérdago. “Literalmente, ya se secaron, están muertas. Esas también van a entrar en un proceso de sustitución paulatina”, expone. Asimismo, un fresno ubicado en el jardín El Pañuelito, junto a la calle Macedonio Alcalá.

De acuerdo con el subdirector de medio ambiente, “se está haciendo un trabajo de reordenamiento”, en el que se busca sustituir a un árbol caído, que está chueco o tuvo plagas y ya no puede recuperarse por uno endémico del estado. Pero, apuntó, que también resista y no tenga los mismos riesgos que los que le antecedieron.

No se puede, explicó, sembrar únicamente ficus u otra especie. “Cuando quitamos una palmera nos dicen que por qué no ponemos otra, pues porque la palmera ahorita prácticamente está condenada a que se muera porque todavía la plaga del picudo no se va de América, no solo de Oaxaca. Entonces buscamos otra especie que sustituya la palmera, de tallo recto”.