Intransitable, la avenida Riberas del Río Atoyac

A unas semanas del inicio de la temporada vacacional de Semana Santa 2019, las calles y avenidas de la ciudad de Oaxaca y municipios conurbados se encuentran intransitables.

La vialidad más afectada es la avenida Riberas del Río Atoyac, la cual se encuentra inundada de baches y enormes hoyancos que a diario tienen que esquivar los automovilistas.

Desde el tramo del crucero de Viguera hasta el puente de la Ex Garita, la carpeta asfáltica está totalmente devastada desde la pasada temporada de lluvias y las autoridades municipales no han tomado cartas en el asunto.

Riberas del Río Atoyac cruza por varios municipios de la Zona Metropolitana de Oaxaca (ZMO) como Oaxaca de Juárez, San Jacinto Amilpas y Santa Cruz Xoxocotlán, pero a la fecha ninguna autoridad ha intervenido para su rehabilitación.

Desde el 2018, la Secretaría de las Infraestructuras y Desarrollo Territorial Sustentable (Sinfra), ejecutó obras sobre los pasos a desnivel de los puentes del Instituto Tecnológico de Oaxaca (ITO) y Bicentenario, mismas que quedaron a medias y ahora lucen abandonadas.

Ante el pésimo estado en que se encuentra esta vialidad, los automovilistas exigen a las autoridades tomar cartas en el asunto o de lo contrario, retirar los operativos que implementan los agentes viales para obligar a los ciudadanos el pago de la tenencia vehicular.

“No es posible que nos estén parando porque no pagamos tenencia en Oaxaca, primero que arreglen las calles y luego pagamos nuestros impuestos, las calles están de la fregada, pero los presidentes municipales y el gobierno estatal nos quieren obligar a pagar derecho vehicular sin hacer primero su trabajo de garantizar carreteras dignas”, reclamó Francisco Javier Zepeda, quien transporta frutas y verduras desde Tehuacán, Puebla hasta la Central de Abasto.

Expuso que debido al pésimo estado de la carpeta asfáltica ha sufrido accidentes en el tramo de Viguera a la Central. “En lo que va del año se me ha ponchado en tres ocasiones mis neumáticos, quién me paga esto si se genera por la corrupción, los más afectados somos los ciudadanos”, refirió.

Esta situación no solamente afecta a los transportistas, sino también a los visitantes que arriba a la capital en cada temporada vacacional.