Este martes, el Gobierno de Estados Unidos presidido por Donald Trump respondió al gobierno de la República Popular China a llegar a un acuerdo arancelario entre ambas potencias.
En conferencia de prensa, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, anunció que el mandatario estadounidense, está abierto a negociar con el gigante asiático en guerra de aranceles.
“La pelota está de su lado. China necesita llegar a un acuerdo con nosotros. Nosotros no tenemos que llegar a un acuerdo con ellos. No hay diferencia entre China y cualquier otro país, salvo que ellos son mucho más grandes”
“Hay mucho trabajo por hacer. Lo entendemos muy bien, pero creemos que podemos anunciar algunos acuerdos muy pronto”, añadió la secretaria de prensa.
Sin embargo, hasta ahora, Estados Unidos y China no han entablado negociaciones de alto nivel, manteniendo un intercambio de insultos y aumentando mutuamente las tarifas.
Lanzan aranceles sin cuartel
Actualmente, China y Estados Unidos se encuentran en una Guerra Comercial, debido a las medidas impuestas por Donald Trump, las cuales aplicó a otros países, entre ellos México.
La guerra comercial desatada por Trump se intensificó el 2 de abril con el anuncio de “aranceles recíprocos” para todo el mundo, medida que rectificó una semana después ante las caídas de los mercados.
Posteriormente, Estados Unidos suavizó su ofensiva con la mayoría de países dejando en vigor solo un arancel generalizado del 10%, pero amentando las represalias a China con tarifas de 145%, por su parte, Beijing elevó los suyos sobre productos estadounidenses hasta el 125 por ciento.
El último movimiento del país asiático en este enfrentamiento fue el bloqueo a entregas de aviones de la Boeing Co., así como las compras de equipos y piezas de avión de cualquier empresa estadounidense.