El expresidente de Estados Unidos, George H.W. Bush, se recupera y fue sacado de cuidados intensivos, tras ser internado en el hospital metodista de Houston poco después del funeral de su esposa, informó su oficina el miércoles.
Bush, de 93 años, se está sintiendo “bien” y está concentrado en el partido postemporada de esta noche de los Houston Rockets, indicó su oficina en un comunicado.
El exmandatario fue trasladado del área de cuidados intensivos a una habitación regular del hospital, donde “se espera que continúe su recuperación en varios días más”, agregó la nota.
Bush desea dejar saber que “tan bien como se siente ahora, está más concentrado en que los Houston Rockets cierren su serie de postemporada contra los Minnesota Timberwolves”, añadió.
El No. 41 presidente de Estados Unidos fue ingresado al hospital el domingo por la mañana, un día después del funeral de su esposa Barbara Bush, quien falleció el 17 de abril a los 92 años.
El exgobernante había contraído una infección que se extendió a su sangre. “Está alerta y conversa con el personal del hospital, familiares y amigos”, agregó el comunicado. “Sus doctores están muy contentos con su progreso”.
El exmandatario, quien sufre de la enfermedad de Parkinson y va en silla de ruedas, ha sido hospitalizado en varias ocasiones en los últimos años.
Bush es el mayor de los cinco expresidentes estadounidenses con vida: Jimmy Carter, Bill Clinton, George W. Bush y Barack Obama.
Es padre de George W. Bush, quien gobernó de 2001 a 2009, y del exgobernador de Florida Jeb Bush, candidato en las primarias presidenciales republicanas de 2016.
