Por tercer día consecutivo, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, convocó a su gabinete en Palacio Nacional para abordar la respuesta del país ante los aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Este encuentro se produce tras la formalización de los aranceles del 25% sobre productos mexicanos, y luego de las acusaciones por parte de la Casa Blanca que señalan al gobierno mexicano de estar vinculado con organizaciones criminales.
En esta nueva reunión privada, la presidenta y su equipo de trabajo continuaron afinando detalles sobre el “Plan B”, que incluye medidas tanto arancelarias como no arancelarias para mitigar los efectos negativos de estas tarifas y proteger los intereses económicos del país. A lo largo del fin de semana, Sheinbaum ha mostrado su rechazo categórico a las acusaciones de colusión con los cárteles de drogas y reiteró la postura de México de no buscar confrontación con Estados Unidos, sino una colaboración respetuosa.
REUNIÓN CLAVE Y PROPUESTAS
Entre los asistentes al encuentro de este domingo estuvieron los secretarios de Medio Ambiente, Alicia Bárcena, y de Agricultura, Julio Berdegué, así como la consejera jurídica del Ejecutivo Federal, Ernestina Godoy. A lo largo de las reuniones, la mandataria mexicana instruyó al secretario de Economía, Marcelo Ebrard, para que implemente el “Plan B” que definirá la respuesta del gobierno ante las nuevas tarifas impuestas por Trump.
Uno de los puntos clave en la agenda de Sheinbaum ha sido rechazar con firmeza las acusaciones de la Casa Blanca, calificándolas de calumnias que buscan desviar la atención del error que, a su juicio, representa la imposición de los aranceles. A su vez, la presidenta propuso la instalación de una mesa de trabajo con el gobierno de Donald Trump, con el objetivo de tratar temas sensibles como la seguridad y la salud pública, áreas en las que México también ha mostrado preocupación ante las medidas adoptadas por el vecino país.
RECHAZO A LA CONFRONTACIÓN Y DEFENSA DE LOS INTERESES NACIONALES
Sheinbaum ha reiterado en diversas ocasiones que el gobierno mexicano no busca una confrontación directa con Estados Unidos, sino que opta por una solución basada en la diplomacia y el diálogo. En este sentido, la presidenta hizo un llamado a resolver los problemas con medidas constructivas y no a través de la imposición de tarifas comerciales que, según ella, solo perjudican a ambas naciones.
En paralelo, Sheinbaum mantuvo conversaciones con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, para abordar el impacto de los aranceles de Trump, aunque la Presidencia no ha dado detalles oficiales sobre el contenido de la conversación telefónica.
EL FUTURO DEL PLAN B Y LA AGENDA DEL FIN DE SEMANA
Tras el encuentro de este domingo, Sheinbaum tiene programada una agenda pública en el Estado de México, donde encabezará la entrega de tarjetas del Programa de Mejoramiento de Vivienda en los municipios de Texcoco y Ecatepec. La mandataria continúa con su trabajo para enfrentar esta nueva crisis diplomática y económica, asegurando que el Gobierno de México está comprometido en defender los intereses nacionales sin ceder ante presiones externas.
Con el “Plan B” en marcha, Sheinbaum se mantiene firme en su postura de buscar una solución pacífica y colaborativa, mientras que la incertidumbre persiste sobre las futuras repercusiones de los aranceles y las tensiones comerciales entre ambos países.