Hierbas que debes evitar en el embarazo

Desde el día uno que te enteras que estás embarazada, empiezas a seguir las recomendaciones de tu médico, en cuanto a cuidados, alimentación, hábitos y demás, pero qué hay de lo que no debes de hacer. Estas son las hierbas que no se recomienda consumir durante el embarazo.

De acuerdo a Clínica Mayo, debes evitar infusiones o té de hierbas, pues se desconoce científicamente los efectos que puedan tener determinadas plantas medicinales, en el desarrollo del bebé.

Por su parte el especialista en Medicina Reproductiva e Infertilidad de la Universidad de Chile, Reinaldo González Ramos, asegura que las hierbas solo en exceso podrían provocar un riesgo en el embarazo, sin embargo, lo mejor sí es excluirlas del plan de alimentación.

Estas son las hierbas que no se recomienda consumir durante el embarazo:

Ruda: es una hierba de fuerte aroma que muchas personas la utilizan para preparar té de ruda y reducir los problemas intestinales, sin embargo, en el embarazo no se recomienda pues de acuerdo a una publicación de la Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana, la ruda tiene un efecto estimulante en el útero y de antiimplantación del óvulo, respecto a unas pruebas de farmacología que realizaron.

Ajenjo: es una planta medicinal con efecto antibacteriano y utilizada para mejorar el proceso digestivo, sin embargo, es una hierba que no debes consumir en el embarazo, pues sus compuestos estimulan el flujo sanguíneo en el útero.

Árnica: utilizada para dolor de cabeza, estómago y golpes o dolores musculares, pero no debes consumir árnica en el embarazo pues ayuda a la estimulación uterina.

Epazote: hierba utilizada en caso de diarrea, problemas estomacales, para regularizar la menstruación y para acelerar las contracciones antes del parto, por ello, no se recomienda consumir epazote en el embarazo.

Otras hierbas que debes evitar en el embarazo son: damiana, eucalipto, gingko biloba, malva, zarparrilla, molle, orégano, angélica y artemisa.

Durante el embarazo, cualquier tratamiento, remedio casero o recomendación de consumo, debes consultarla antes con tu médico, pues solo él será el indicado para cuidar tu salud y la de tu bebé.