La empresa, Miniwiz, desarrolló una máquina llamada “Trashpresso” la cual combina una trituradora, un compresor y un brazo metalico para producir automáticamente parte de los cargadores.
“Esta pandemia de COVID-19 genera tantos desechos. Muchos desechos de un solo uso, especialmente todos los desechos plásticos que en realidad se usan para protegernos […] pensamos que si podemos [usar] esta contaminación en lugar tirarla a un basurero y maltratarla, ¿cómo podemos convertirla en un producto valioso durante esta pandemia? Entonces, pensamos en usar esto y convirtiéndolo en una nueva generación de cargador digital inalámbrico”.
El desecho de la máscara se usa para hacer la carcasa de plástico en la que luego se ensambla un cargador inalámbrico con otras partes electrónicas.
“Recolectamos alrededor de 10,000 máscaras, agregadas con material proporcionado por Miniwiz. Hicimos más de 40,000 cargadores para nuestros empleados”, dijo la vicepresidenta ejecutiva de Fubon, Cindy Lin.
Miniwiz no planea comercializar estos cargadores inalámbricos, pero en su sitio web puedes encontrar artículos hechos con plástico reciclado, desde macetas hasta lentes de sol. Esperan que esta iniciativa inspire a otras empresas para comenzar a reutilizar este desecho.
Un informe de diciembre de 2020 del grupo de defensa OceansAsia encontró que casi 1.600 millones de máscaras inundarían los océanos solo en 2020, según las estimaciones de producción global y otros factores. Estas mascaras podrían tardar hasta 450 años en descomponerse.