No se trata de solemnizar aquello que está en blanco y negro, porque es denostar el presente, es mejor siempre preferir el ahora, yo me decanto por esa manera de hacer crónica. Vale más lo que estamos viviendo que la nostalgia por algo que hemos perdido” me decía el escritor Jorge Pedro Uribe Llamas en 2019.
Fiel a esta convicción ha caminado siempre con una mirada al pasado, pero con el cuerpo, la mente y la actitud en el presente. Ejerciendo desde el periodismo y la literatura se ha dedicado desde 2017 hasta 2021 a escribir los textos que integran Crónicas de la verdadera conquista (Crítica/2022) un recorrido de Tenochtitlan a la CDMX que concentra un cúmulo de voces de diferentes épocas.
La llegada de Cortés a Cozumel, la fundación de la Villa Rica de la Vera cruz, la Noche Triste (hoy victoriosa) se combina sin el menor respeto por la cronología, en una suerte de viaje de tiempo con la pandemia de Covid-19, el terremoto de 2017, las viejas cantinas, oficios y lugares que pueblan la Cedemequis. Alternando con los viajes del autor por diferentes estados de la República, los pueblos vecinos de la capital e incluso por el extranjero. Si a primera instancia alguien te cuenta las historias que este libro condensa probablemente pienses que nada tiene sentido, para al final llevarte la sorpresa de que sí.
Además viene acompañado de un prólogo del también escritor y periodista Guillermo Osorno que escribe del autor con una mirada paternalista y profesional, recordando que el sueño de juventud de Uribe Llamas, era “mudarse a vivir a la Ciudad de México” y que por ello pasaba muchas horas de su adolescencia en el Sanborns de Aguascalientes, “una especie de embajada chilanga”.
El libro se compone de 148 páginas y pese a que va rápido, se lee lento, a menudo tienes que regresarte para entender el humor, los guiños y la información que brinda el escritor.
Al principio me ha dado la impresión de que la conquista fue la excusa para hablar desde el yo, sin que sea él, para hablar desde el yo y desde el todos.
En cada página juega, imagina escenarios, brinca en el tiempo, mete rimas y fragmentos de canciones, así que el lector no debe sorprenderse si cree que algo ya lo había oído antes, tampoco si se topa con concurrentes “Oigo, me cuenta, me dijo” pues son palabras muy repetidas, resultado del oficio de escuchar.
Crónicas de la verdadera conquista (Crítica /2022) se suma los libros Amor por la Ciudad de México (2015) y Novísima grandes mexicana (2017) que conforman el catálogo de Jorge Pedro Uribe Llamas, miembro asociado del Seminario de Cultura Mexicana e integrante del Colegio de Cronistas de la Ciudad de México.
@Urieldejesús02
