Voces, Ecos y Secretos: Hasta siempre Imparcial de Oaxaca
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Arte y Cultura

Voces, Ecos y Secretos: Hasta siempre Imparcial de Oaxaca

“Entré como un niñito dispuesto a experimentar y a que le sucedieran cosas, avanzo ahora como un periodista”


“Muchas gracias. Hasta siempre Imparcial de Oaxaca”: @Urieldejesús02
“Muchas gracias. Hasta siempre Imparcial de Oaxaca”: @Urieldejesús02

Es la media noche, llevo horas postergando el inevitable resultado de una decisión que tomé: escribir mi última columna para las páginas de El Imparcial de Oaxaca. ¿Cómo hacerlo?, ¿Cómo decirle adiós a estas páginas que me han acompañado por tantos años?

Ya eché un vistazo por el archivo, leí algunos artículos al azar y en ninguno encontré las palabras para decir adiós, quizá es porque la vida es una eterna despedida y esas palabras no existen, uno las pronuncia sin saberlo, simplemente suceden.

Pero en este caso no es así, hace meses vengo pensando en este momento y ahora que está sucediendo, no sé cómo encausarlo. Miro la computadora, veo el resto de caracteres que me faltan, repaso cada elemento de mi entorno y nada… llegan mil ideas, pero ninguna precisión.

No quería hacer mucho uso de la memoria, pues tiendo a ser sentimental (muy…en exceso). Pero tengo que hacerlo. Fue un 4 de septiembre de 2016 cuando publiqué mi primer artículo, “El hombre lobo es alérgico a la luna ¿será?” que salió en las páginas de El Imparcialito; al principio como un juego, no obstante, pronto descubrí en el oficio periodístico la mayor satisfacción de mi vida. Y entonces esa fugaz incursión permaneció semana tras semana, año tras año, columna tras columna.

Han pasado siete años y muchas cosas desde aquel día, el suplemento que me vio nacer, ya no existe, muchos compañeros ya no están, han ido y venido lectores, el periódico ha cambiado, la ciudad ha cambiado, mi entorno ha cambiado: yo he cambiado.

Son 660 artículos los que publiqué, algunos de una, dos y hasta cuatro páginas; pienso en las horas de escritura y sólo me embarga un sentimiento de emoción, porque no he sentido el pasar de estos años y vaya que los he vivido. He disfrutado cada renglón, cada página y la aventura que ha representado el hacer semanalmente una cuartilla de palabras.

Tengo 21 años, entré de 14 al periódico y aunque suene a exageración -permítanme la melancolía- pero estos años representan casi la mitad de lo que llevo viviendo y tal vez eso explique porque me está costando tanto este adiós.

En el Imparcial de Oaxaca nació mi vocación periodística, experimentando en sus páginas me formé: “El Imparcialito”, “La frase de la semana”, “Oaxaca tierra de cultura”, “Estilo joven”, “Entrevistas sin fecha” y “Voces, ecos y secretos” han sido los espacios que cultivé y pude tener en este medio, del que hoy (cuando usted esté leyendo esto), me despido.

La razón, el querer explorar nuevos horizontes en otras geografías y latitudes. Pero me voy lleno de agradecimiento. Cierro aquí uno de los proyectos más importantes de mi vida. Con el mismo entusiasmo infantil (pero más maduro) que el primer día. Entré como un niñito dispuesto a experimentar y a que le sucedieran cosas, avanzo ahora como un periodista.

Gracias a la Sra. Mina Fernández Pichardo, al consejo editorial de El Imparcial y a Gonzalo Carrera que confiaron en mí y me dieron la primera oportunidad. Gracias a Bianca Robles mi editora de más tiempo, de la que tanto aprendí. A Lisbeth Mejía que me apoyó y aconsejó siempre, a Rubén Morales por sus fotos y a Yadira Matías que me acompañó en esta etapa final; a Paty Meraz, Diego Mejía y el resto de editores. A los diseñadores, repartidores, a las secretarias y a todo el equipo de compañeros que hacen posible que ustedes nuestros lectores tengan el periódico cada mañana en sus manos. Gracias por leerme. Y como dice el “Poema de la despedida” de José Ángel Buesa: Te digo adiós cuando en verdad te quiero/ te digo adiós, sabiendo que no te olvidaré. Muchas gracias. Hasta siempre Imparcial de Oaxaca.

@Urieldejesús02


aa

 

Relacionadas: