Las palabras no tienen fecha de caducidad: Benito Taibo
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Las palabras no tienen fecha de caducidad: Benito Taibo

El escritor revisa en Pasar inadvertido 44 años de producción lírica, marcada por temas como el mar y el amor


Las palabras no tienen fecha de caducidad: Benito Taibo | El Imparcial de Oaxaca
Benito lee un poema cada jueves en Instagram

 

La poesía es el gran compendio de pasiones humanas. Está ahí como un asidero para salvar la vida. Es parte esencial de nuestro andar. La poesía desnuda, porque las palabras no tienen fecha de caducidad”, afirma Benito Taibo (1960).

Más conocido por su obra narrativa, que empezó a escribir a los 48 años, la poesía, cuenta en entrevista, es el género que lo ha acompañado toda su vida, que empezó a crear desde muy joven y sobre el que publicó su primer libro, Siete primeros poemas (1976), a los 16 años.

“La poesía es el alambique de las palabras”, comenta el promotor de la lectura en alusión al aparato utilizado para la destilación de líquidos. “Empecé a escribirla en mi adolescencia. Un remedo, un intento, una apuesta aparentemente suicida en un hogar de narradores”, admite.

Cuenta que la poesía era una constante en la casa de su padre, el escritor y periodista Paco Ignacio Taibo I, “donde se declamaban versos en voz alta a la menor provocación”, y en cuya mesa convivieron grandes poetas como Efraín Huerta, Alí Chumacero y José Emilio Pacheco. “De todos ellos aprendí”.

Tras la publicación de los poemarios Vivos y suicidas (1978), Recetas para el desastre (1987) y De la función social de las gitanas (2002), Taibo publica ahora, “con bastante pudor”, la primera antología de su trabajo lírico, Pasar inadvertido (Seix Barral), que reúne lo más representativo de sus textos escritos entre 1978 y 2022.

Es una revisión de 44 años. No le metí mano a mis poemas, porque estoy convencido de que vendría a reclamarme agriamente ese que fui. Los dejé como estaban porque eso pensaba, así escribía, eso sentía, y no soy nadie para enmendarle la plana a ese que fui”, aclara.

Quien estudió Historia en la UNAM asegura que “he crecido, he prendido, he seguido leyendo mucha poesía y eso ha sido determinante para ser quien soy. El truco es intentar encontrar, entre todas las voces, tu propia voz y eso es un largo camino”.

Destaca que el mar ha sido una constante en su obra. “El mar como una suerte de metáfora de la necesidad de naufragar para poder sobrevivir”.

Agrega que publicar este título es una pequeña provocación. “Durante años se dijo que la poesía no se publicaba porque no se vendía. No estoy de acuerdo. Creo que hoy por hoy, los jóvenes leen más que poesía.

Para que la poesía no pase inadvertida, leo un poema de otros autores todos los jueves en Instagram. Por supuesto, haciendo la apuesta de que escuchen, porque la belleza existe y ayuda en los peores naufragios y cosas terribles”.

El director de Radio UNAM adelanta que prepara un libro de cocina que, “más que con recetas, tiene que ver con recuerdos”, concluye.

 

Pasar Inadvertido

aa

 

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