Ojo de buey: El primer timbre de América
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Ojo de buey: El primer timbre de América


Ojo de buey: El primer timbre de América | El Imparcial de Oaxaca

DÉBORA ESCOBAR SOLANO/MUFI

Es bien sabido que la primera estampilla postal del mundo vio la luz en Inglaterra en el año 1840, pero te has preguntado ¿cuál fue el primer país en emitir un timbre postal en América? El “Ojo de buey” emitido el primero de agosto de 1843 por Brasil, tan sólo 3 años después del ‘Penny Black’ fue el primer timbre del continente americano.

Esta primera emisión fue creada a través de una serie de tres piezas, las cuales contenían un valor fácil de 30, 60 y 90 reais (moneda legal de Brasil). El sobrenombre con el que se le conoce fue impuesto por los pobladores de la época, para quienes el diseño oval y un tanto obscuro remitía muy bien al ojo de buey. Muchos de los elementos usados en ese diseño ayudaron a lograr el parecido con este órgano bobino, el patrón guilloché en el fondo remite al iris; su marco oval, acotado por su extremo izquierdo y derecho delinea la silueta ocular y, por último, su valor numérico ubicado justo en su centro con aspecto redondo de cuerda a una pupila.

Cabe destacar que el diseño fue inspirado del modelo surgido en los billetes impresos por la firma británica Perkin, Banco & Company de Londres, para el Banco Imperial de Brasil en el siglo XIX. A diferencia de otros timbres de la época se decidió utilizar el numeral del costo del timbre, en vez de la efigie del gobernante Pedro II como motivo principal del mismo. Este detalle se debe a que el gobierno de Brasil consideraba que los documentos que viajan por correo postal tienden a ser sobreimpresos, cancelados o manchados y esto podría demeritar de alguna manera la imagen del emperador, así fue como la emisión decidió no incluir una efigie y optar por unos números.

La peculiaridad del timbre “Ojo de buey” radica en su rareza gráfica y el corto periodo durante el que circuló y, por ende, la dificultad para conseguirlo pues en 1846, tres años después de su elaboración, el timbre fue reemplazado por una versión nueva y las piezas anteriores dejaron de circular; posteriormente, fueron incineradas por la oficina postal.