Elsa Medina, “una vida atrás de la lente”
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Arte y Cultura

Elsa Medina, “una vida atrás de la lente”

La fotógrafa mexicana rememora su trayectoria, una que la ha llevado desde la imagen noticiosa hasta otras de tipo documental, ligadas más a lo personal


Elsa Medina, “una vida atrás de la lente” | El Imparcial de Oaxaca

Hace tiempo que Elsa Medina (Ciudad de México, 1952) dejó de ir tras la foto noticiosa, de seguir a las imágenes del día que hasta hace unos años, antes de que los archivos se pudieran enviar con un solo “clic”, debía mandar en rollos, a través de pasajeros a los que veía como “lectores” del diario en que trabajó de 1986 a 1999: La Jornada. Ahora, entre risas, dice que toma fotografías desde su ventana y que no ha encontrado una cámara digital a su gusto y necesidades. Tiene una, pero no se llevan muy bien.

“No te creas, extraño el fotoperiodismo, pero ahora estoy enfocada en proyectos personales”, decía en 2015 la entonces galardonada con la Medalla al Mérito Fotográfico que otorga el Instituto Nacional de Antropología e Historia. Esas palabras, que recogía una entrevista de Cuartoscuro en septiembre de tal año, parecen resumir la actualidad de Medina, quien alejada de las imágenes de políticos, de aquellas que retratan la migración o los problemas sociales, se ha volcado sobre algo quizá más personal, como la memoria o la enfermedad.

Lejos se ven los años en que la también fundadora del periódico El sur de Guerrero atendía órdenes de trabajo, no así la búsqueda de sus propios temas, esos que incluso ha costeado por cuenta propia, aunque después de hayan divulgado en los medios donde trabajó.

FOTO: ELSA MEDINA

Y en esa carrera, que compagina con la docencia, Elsa también aprendió que a la fotografía hay que hacerla en y desde cualquier lugar, ya sea en Guerrero, Ciudad de México o Tijuana, como en su caso. “Todos los lugares tienen muchas cosas que suceden” expone la invitada a la tercera Bienal de Fotografía Oaxaca, dentro de la cual habla de su labor, en una plática con su par Domingo Valdivieso.

Elsa comparte su vida y obra ligada a la cámara, una que, cuenta, no está exenta de la enajenación, pero que aprendió a reconocer mientras buscaba la verdad, como recuerda lo hacía La Jornada, donde laboró en un equipo liderado por Pedro Valtierra. Y aunque hablar de verdad ya le suena extraño, aún piensa que hay que ir tras ella, y reconocerla en sus múltiples facetas.

Una vida atrás de la lente. Con ese nombre, la participación de Elsa Medina recoge las experiencias de más de 30 años, entre ellos el tiempo en que coincidió con el fotógrafo Nacho López. De él, quien fuera su profesor en un taller, supo que en esta trayectoria hay que ir despacio, pero constante. Y en carne propia, a quitarse los prejuicios y alimentarse con otros recursos, a “ver muchas fotos, ver cine, oír música, todo lo que te pueda alimentar como individuo”.

 

FOTO: ELSA MEDINA

Ahora, “me dedico a hacer fotos desde la ventana de mi casa”, suelta quien también ha buscado las pausas para seguir en la fotografía, una que ha desarrollado también en el extranjero: en Haití, Guatemala o Nicaragua. Desde la mirada de quien ha compartido su obra en libros o revistas, también en más de 50 exposiciones colectivas en el país y fuera de él, piensa que en el contexto actual, “la tecnología lo que tiene como ‘virtuoso’ es esa posibilidad de hacer fotos ‘bien hechas’”. A la vez que percibe “muy buenos fotógrafos” y una mezcla “entre la foto documental y el documental personal, lo contemporáneo. Han cambiado los paradigmas de lo que es y debe de ser (la fotografía)”.