La Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha emprendido un proyecto para sustituir los tradicionales medidores analógicos por modernos medidores digitales. Esta iniciativa busca brindar a los usuarios una lectura más precisa del consumo eléctrico en sus hogares o negocios, generando inquietud y polémica entre la población respecto a cuál de los dos tipos de medidores es más exacto.
El medidor digital, que opera en tiempo real mediante un sistema de luces LED, informa a los usuarios sobre su consumo eléctrico, la intensidad del flujo de electricidad y la cantidad de luz consumida en el lugar de conexión. La CFE destaca que este tipo de medidor ofrece una lectura más precisa y detallada.
En contraste, el medidor analógico o electromecánico cuenta con un disco giratorio que indica la velocidad de consumo eléctrico. A mayor velocidad de giro, mayor consumo y, por ende, un costo más elevado. Este dispositivo, con su característica carátula de vidrio, permite a los usuarios visualizar parámetros eléctricos clave.
La incertidumbre sobre cuál es el mejor medidor, analógico o digital, persiste entre los usuarios, ya que algunos sostienen que uno es más preciso que el otro. Frente a estas inquietudes, la CFE ha asegurado que ambos tipos de medidores son capaces de proporcionar lecturas precisas y ninguno tiene ventajas significativas sobre el otro en cuanto a exactitud.
Aunque el medidor digital presenta una leve ventaja al mostrar datos más precisos gracias a su pantalla de cristal líquido, la CFE sostiene que ambos dispositivos son efectivos y cumplen con su objetivo principal: brindar lecturas de energía eléctrica correspondientes al consumo para la facturación del servicio.
¿Cómo leer tu medidor?
Para los medidores analógicos, que pueden tener de cuatro a cinco carátulas, se debe comenzar la lectura desde la primera manecilla del extremo derecho (unidades) y avanzar hacia la izquierda (decenas y sucesivamente). Si una manecilla se encuentra entre dos números, se considera el número menor. La lectura se toma de derecha a izquierda, pero se interpreta de izquierda a derecha.
En el caso de los medidores digitales, se deben considerar todos los dígitos emitidos, que pueden ser hasta seis números. La lectura se realiza de izquierda a derecha, y en el lado derecho se encuentran las siglas kWh (kilowatt hora), que representan la lectura al momento de la revisión.