Si te falta un pequeño espacio por rellenar, no te atormentes, con estos tips puedes llevártelos a casa con la seguridad de que podrás usarlos cuantas veces quieras sin traerlos chancleteando o con el temor de que salgan volando.
1. Plantilla de silicón.
Si los zapatos son excesivamente más grandes, estamos hablando de casi 2 tallas extra, este tipo de plantilla es tu solución al problema. Puedes encontrarla en zapaterías y tiendas especializadas.
2. Doble calcetín.
Si son unos zapatos cerrados puedes aplicar la de doble calceta para que no te vayan a sacar ampollas y tampoco se te salga el talón a la hora de levantar tu pie.
3. Algodón.
Sean tacones, zapatos o zapatillas abiertas, haz una bolita de algodón y colócala en la parte de atrás de tu zapato; justo donde se posiciona la altura del talón.
4. Media plantilla.
Es uno de los recursos más accesibles la puedes usar en todo tipo de zapato, sólo si estamos halando de media talla más grande que la que normalmente usas.