Familiares de una niña de 13 años que fue violada y una joven de 21 que fue asesinada, exigieron justicia y la aprehensión inmediata de los agresores, luego de interponer las denuncias ante las instancias correspondientes.
Por redes sociales, las familias de ambas víctimas lamentaron que a la fecha los agresores estén en libertad y no se tengan avances en las investigaciones, con el pretexto de la pandemia y la suspensión de varias actividades administrativas.
Daniel Azamar García y María de Jesús, padre y madre de una menor de 13 años, víctima de abuso sexual hace más de un año, expusieron que el agresor sigue prófugo a pesar de la liberación de una orden de aprehensión en su contra desde el 2019.
Por medio de un video, explicaron que ambos tramitaron un amparo en contra de autoridades de la Fiscalía General del Estado, la Fiscalía Especializada para la Atención a Delitos contra la Mujer y la Agencia Estatal de Investigaciones, por falta de actuación en la aplicación de justicia.
Expusieron que a más de un año del hecho, José Enrique C.A. no ha sido aprehendido, pese a la promesa de las autoridades de hacerlo de manera inmediata. Ambos lamentaron que lejos de aplicarse justicia, las instancias correspondientes los han revictimizado.
“La fiscal (de atención a delitos contra la mujer), estando nosotros en una reunión, hace mucho tiempo con ella y estando la niña presente, le dijo: pues ni modo, ya te violaron, ya no hay nada que hacer”.
Después de reiterar la exigencia de justicia y la aprehensión del violador, los padres recordaron que por la violación la menor quedó embarazada y tuvo un bebé.
Familiares de la joven Alma Itzel Romero García, quien desapareció el 3 de noviembre y fue hallada sin vida cuatro días después, exigieron justicia por este feminicidio y la aprehensión de los presuntos responsables.
Con el respaldo del Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas A.C. (CEDHAPI), Mayra García Cruz, madre de Alma Itzel, expuso que a su hija la violaron y la golpearon antes de acabar con su vida y arrojaron desde un puente, su cuerpo desnudo quedó tirado en un río.
En conferencia virtual, la madre de la joven expuso que Alma era originaria de la comunidad de Morelos Itundujia, de Santa Cruz Itundujia, Putla, que emigró a trabajar en una fábrica en la Ciudad de Tijuana y regresó para pasar las fiestas de Día de muertos.
La madre señala que un ex compañero del bachillerato la invitó a una celebración en la casa de su familia, ubicada en la comunidad de Victoria Itundujia, pero ya no regresó a casa.
Por la distancia y por lo accidentado del lugar, Alma le mandó mensajes a su mamá para decirle que llegaba el 3 de noviembre, pero al no llegar y no tener comunicación con ella el 4 de noviembre, Mayra García fue a la comunidad de Victoria Itundujia a entrevistarse con el joven que la había invitado a ese lugar, quien aseguró que ella ya se había regresado con un joven de nombre Nicanor.
Pese a dar con los nombres de los jóvenes que la vieron por última vez e interponer las denuncias correspondientes, la madre de Alma afirmó que no hay ninguna aprehensión y uno de ellos se dio a la fuga.
