El secretario de Salud de Oaxaca, Donato Escamilla Casas, se pronunció a favor de la iniciativa para reformar la Ley de salud e incluir la aplicación del tamiz cardiológico en la entidad, para la detección oportuna de cardiopatías graves en recién nacidos.
El funcionario destacó la importancia de este tamiz que se aplica en otros estados del país y cuya aplicación inició en Sonora por la propuesta y el trabajo conjunto de una oaxaqueña con legisladores de esa entidad del norte.
“Estamos en la mejor disposición de apoyar, porque mientras más rápido se detecte una enfermedad, más rápido se corregirá”, expuso el funcionario, quien insistió en que la prevención siempre será importante en el sector salud.
La semana pasada, en el Congreso local, la diputada local Victoria Cruz Villar presentó la iniciativa para detectar a tiempo cardiopatías en recién nacidos, como una obligación de las autoridades en garantizar los derechos de los niños y las niñas, sobre todo aquellos intrínsecos a la vida, la supervivencia y su desarrollo.
La diputada recordó que en Sonora, primer estado en legislar y aprobar el tamiz cardiológico, la cardióloga pediatra oaxaqueña, Erika Flor Sosa Cruz, fue promotora y encargada del proyecto que a la fecha ha salvado varias vidas.
El tamiz cardiológico consiste en colocar una pulsera de luz en la mano y en el pie del bebé por un minuto, donde se muestra la cantidad de oxígeno que hay en la sangre. Al terminar, se analiza la diferencia de oxígeno, lo que hace sospechar si existe o no un defecto cardíaco.
La especialista ha precisado que los defectos que detecta el Tamiz Cardiológico pueden provocar la muerte súbita del recién nacido, ya sea antes del primer mes de edad o durante el primer año de vida, por lo cual su implementación es de vital importancia porque también detecta hipertensión pulmonar e infección en la sangre.
“Esta iniciativa pretende prevenir situaciones de riesgo en la salud de los menores, ya que la detección oportuna brinda el tiempo que se necesita para el tratamiento y cirugía del bebé, además de disminuir o limitar el daño que pudiera causar el defecto cardíaco en el cuerpo del niño, tanto a nivel cerebral como en cualquier otro órgano”.